Hacia una migración más ordenada, segura, regular y humana

En el marco de la Declaración de Los Ángeles sobre Migración y Protección, México se ha unido a más de una veintena de países en la región con el objetivo de crear las condiciones para una migración ordenada, segura, regular y humana a nivel hemisférico. En línea con la visión del presidente López Obrador, los países firmantes suscribimos una visión en la que la migración sea voluntaria, una decisión personal, informada, y no una necesidad. Asimismo, suscribimos que las vías de migración regular, incluyendo programas de movilidad laboral circular, por ejemplo, mejoran las condiciones migratorias de la región.

Bajo los principios de la Declaración de Los Ángeles, México ha dado la bienvenida a las decisiones del gobierno de EU a inicios de este mes en materia migratoria. El contexto actual destaca, fundamentalmente, por dos características. Por un lado, la dimensión de los flujos migratorios difícilmente tiene comparación en las últimas décadas. En efecto, el año pasado observamos el arribo de cerca de 2.4 millones de personas migrantes a EU. Esto es equivalente a cerca del doble de la población total de Trinidad y Tobago o la mitad de Costa Rica.

Por otro lado, observamos flujos migratorios cada vez más complejos. Los viajes hacia el norte conllevan más unidades familiares, en contraste con el viejo patrón del hombre joven que migraba sin su familia. Además, en 2022 recibimos en nuestro país a personas migrantes y solicitantes de refugio de 118 países; más de cien mil han solicitado refugio en México. Contrario a los patrones previos, se registraron flujos muy numerosos de personas venezolanas, cubanas y nicaragüenses viajando de manera irregular por la región.

Frente al contexto actual, las medidas anunciadas por EU han comenzado a dar importantes resultados con el objetivo doble de abrir vías para una migración regular y también disminuir considerablemente los riesgos vinculados con los flujos migratorios irregulares. En primer lugar, vale la pena destacar que, a partir de las nuevas medidas de EU —que tienen como origen la admisión de personas ucranianas tras la invasión de Rusia el año pasado—, las personas de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela cuentan con una nueva vía segura y regular de acceso, por vía aérea, a dicho país.

Al día de hoy, existe una vía segura para que cientos de personas venezolanas sean aprobadas para llegar a EU a través del nuevo programa. Esto significa que, en vez de atravesar el Darién, Centroamérica y México, han comprado un boleto de avión y han llegado a su destino de manera directa, sin entrar en contacto con organizaciones del crimen organizado. Además, cuentan con un estatus regular que les permite formar parte del mercado laboral estadunidense, con las protecciones legales correspondientes. Esta vía es ya una realidad también para personas cubanas, nicaragüenses y haitianas. En ese sentido, observamos un proceso expedito en el cual, en cuestión de menos de un mes, las autoridades estadunidenses han aprobado decenas de miles de solicitudes.

En segundo lugar, destacan también los resultados para ordenar el flujo de migrantes y que ocurra de manera regular y segura. Entre octubre de 2022 y enero de 2023 los encuentros de personas venezolanas en la frontera entre México y Estados Unidos se han reducido hasta en un 89 por ciento. En ese sentido, y contrario a la idea de que México recibirá 30 mil personas diarias a través del Título 42, los retornos de personas venezolanas a nuestro país han disminuido en hasta 99 por ciento. Por ejemplo, el 12 de enero recibimos únicamente a un ciudadano venezolano en México. Puesto que hay menor flujo migratorio hay también un menor número de retornos a través del Título 42. Lo mismo sucede con otras nacionalidades: en contraste con principios de enero, se registra una reducción de 97.5% de los flujos irregulares en la frontera con EU.

En paralelo, también hemos sesionado nuevamente el grupo de acción humanitaria para personas migrantes en territorio nacional, integrado por Acnur, OIM, Unicef y el Comité Internacional de la Cruz Roja. En conjunto con nuestra red consular en la frontera, trabajamos coordinadamente para fortalecer la respuesta humanitaria en la frontera norte de México, a fin de respaldar a las personas migrantes y solicitantes de refugio que se encuentren en nuestro país.