El voto de los resentidos
No te guardo rencor, pero tampoco tengo amnesia. Anónimo Uno de los sentimientos más comunes en los humanos es el resentimiento o rencor, que tiene muchos sinónimos: animadversión, odio, inquina, encono, aversión, aborrecimiento, tirria y otros. Los estudiantes ...
No te guardo rencor, pero tampoco tengo amnesia.
Anónimo
Uno de los sentimientos más comunes en los humanos es el resentimiento o rencor, que tiene muchos sinónimos: animadversión, odio, inquina, encono, aversión, aborrecimiento, tirria y otros. Los estudiantes están resentidos porque las calificaciones no fueron correctas; los adultos, porque las promesas de amor no se cumplieron; los deportistas, porque perdieron y los ciudadanos, porque las expectativas que tenían nunca se convirtieron en realidad.
No cabe duda que lo acontecido en estos últimos años es digno de una reflexión; fruto de la lucha constante entre dos líneas de pensamiento; la elección de 2018 dio 30 millones de votos a Andrés Manuel López Obrador, mientras la oposición tuvo que guardar silencio, preocupados porque sabían que el nuevo presidente “era un peligro para México”. El optimismo abierto o moderado se fue enfrentando a la realidad de cada día y ahora, cuando el sexenio está a punto de concluir, surgen los resentidos por muchas razones.
Algunos de los resentidos fueron cercanos, incluso amigos del Presidente, y se retiraron poco a poco, pero la mayor parte de los resentidos son los millones de mexicanos que esperaban un cambio, un progreso, una mejoría en sus vidas y no lo tuvieron.
¿Cómo no van a estar resentidos quienes trabajaban ya en el mejor aeropuerto del mundo que fue cancelado sin justificación alguna? ¿Cómo no van a estar resentidos los ciudadanos a los que se les quitó el Seguro Popular, y han tenido que luchar para conseguir un sitio para sus enfermos con un costo altísimo?, ¿y cómo estará el ánimo de quienes por los errores de salud perdieron a sus seres queridos, a sus hijos con cáncer, a quienes necesitaban una operación?
Y no digamos los resentidos por la inseguridad, los que perdieron a un familiar por homicidio o está desaparecido y no lo pueden encontrar, y al pedir auxilio y ayuda en Palacio sólo encuentran indiferencia.
Hay empresarios y comerciantes resentidos, hay agricultores y transportistas resentidos, hay amas de casa, trabajadoras, empleadas, resentidas, defensores del medio ambiente resentidos, y ese resentimiento se manifieste cada día en la calle o en las plazas, en los palacios municipales, y en las carreteras, lo vemos todos los días.
¿Y qué pueden hacer los resentidos?, por años han tenido que callar porque su empleo está en juego, y temen que los “bonos de bienestar” se pueden acabar, pero se acerca la hora de la verdad, y así como votaron por Morena pensando que habría cambios favorables para sus vidas, ahora podrán votar por la oposición que ofrece un panorama distinto, alejado de la mentira, la simulación, en engaño y la corrupción.
Afortunadamente cada día conocemos más y mejor a Xóchitl Gálvez, conocemos su historia de esfuerzo y progreso, sus éxitos internacionales, sus principios y sus ideales, su identificación lo mismo con los campesinos que con los banqueros, los estudiantes, las amas de casa, las madres de los desaparecidos. Los aplausos y vítores en cada aparición lo comprueban, (Xingona, de Ivonne Melgar, 2024) y cada día sabemos más del proyecto de nación que salvará a México.
Xóchitl Gálvez ofrece lo que todos deseamos: lograr la libertad plena de todos los mexicanos y el respeto a cada uno sin importar su condición. Los programas de recuperación están ahí y se harán realidad, porque Xóchitl y su equipo pueden ganar no sólo la Presidencia, sino diputaciones, gubernaturas, presidencias municipales, etcétera, para que México vuelva a ser un país digno, respetado y respetable.
En este proyecto de nación todos debemos participar, somos millones y podemos ganar; los resentidos de la 4T ya mostraron su rechazo en las elecciones de 2021, ellos y nosotros volveremos a rechazar a Morena y sus mentiras, ahora con más fuerza y más energía, votando el 2 de junio; tú estimado lector, y todos tus conocidos y familiares, tienen que votar.
Votaremos por Xóchitl y su proyecto; México no es de López Obrador ni de Morena, México es de todos.
