El otro Informe

Llegamos al Tercer Informe de Gobierno y, casi a la mitad del camino, es hora de hacer un alto y echar un vistazo a algunas cifras —contundentes, irrebatibles— que nos deja el gobierno de Peña Nieto que, seguramente, privilegiará más las del optimismo oficialista que las de la realidad de carne y hueso.

Repasemos, pues, qué nos está dejando prácticamente la mitad del gobierno peñista:

1) El crecimiento económico promedio, entre 2013 y 2015, será de 1.6 por ciento. Raquítico. En 2012 (último año de Calderón), la economía creció 3.9 por ciento. En 2013 (primer año de Peña) se desplomó hasta 1.1 por ciento (Fuente: Inegi). 2015 seguramente no rebasará  2% del PIB, según estimaciones del Banxico, que ubica un crecimiento mínimo de 1.7 por ciento. Y sí: ¡es la economía, estúpidos!

2) La deuda pública del gobierno peñista crece de manera preocupante: ya asciende a seis billones 229 mil 177 millones de pesos, de acuerdo a cifras de Hacienda (aumenta a un ritmo de mil 622 millones de pesos diarios). Es la más alta de la historia reciente y factor de alerta roja por una razón histórica: en las grandes crisis contemporáneas (con López Portillo y la detonada en 1994-95 por Salinas de Gortari), uno de los sellos fue la deuda exorbitante. ¡Cuidado!

3) Durante 2015 habrá 250 mil mexicanos que perderán su empleo, anunció el secretario del Trabajo, Alfonso Navarrete Prida. Las nuevas plazas de trabajo no serán suficientes para compensar el daño a los hogares mexicanos, ya que son temporales y de salarios bajos.

4) El dólar se enfila, a pesar de los esfuerzos del Banco de México, hacia los 18 pesos. “Es positivo”, dice Peña Nieto. No es así. No todos somos exportadores. Elemental: si fuera tan “positivo”, ¿por qué entonces el Banxico le ha inyectado alrededor de ocho mil millones de dólares a la economía para detener la caída del pesito mexicano? Y allí está el daño a empresas que pierden valor con deudas contratadas en dólares, y el consecuente resultado: el despido de trabajadores para sanear finanzas.

5) La actividad industrial en la lona: a mediados de año registró su peor revés durante los últimos 25 meses a tasa anual, al retroceder 0.44% y, de paso, sumó su segundo descenso del año, de acuerdo a cifras ajustadas del Inegi. Si las empresas no son productivas, la economía se estanca.

6) Desde el arranque del sexenio hasta el cierre de 2014, hay dos millones más de pobres. Pasaron de 53.3 a 55.3 millones de pobres (Fuente: Coneval). Cada mes, alrededor de 80 mil nuevos pobres. Veinte mil a la semana. Casi tres mil diarios. Son las cifras del fracaso.

7) Petróleo mexicano de exportación, a 33.71  dólares por barril. Su cifra más baja desde 2009.

8) En el renglón de seguridad, las cifras también abaten: durante el gobierno peñista se han registrado alrededor de 57 mil 410 asesinatos, de acuerdo al riguroso conteo del prestigiado semanario Zeta, con base en cifras del SNSP y de procuradurías de justicia estatales. Diecinueve mil muertes violentas al año. La violencia, nada más, no cesa.

9) Ayotzinapa, Casa Blanca y la fuga de El Chapo Guzmán exhibieron la impunidad y al sistema de seguridad nacional. El daño ante la comunidad internacional ha sido terrible.

10) Alrededor de 12 mil mexicanos han desaparecido desde 2013, relata Amnistía Internacional.

Hasta aquí las cifras.

Y un par de lecturas más que válidas:

“Es decepcionante un verdadero despegue del crecimiento (en México). Ustedes siguen esperando un milagro...”, le dijo el premio Nobel de Economía, Paul Krugman, a industriales mexicanos.

Y desde la influyente Washington, el Pew Center encuesta que siete de cada diez mexicanos están insatisfechos con el rumbo de México.

Así andan las cosas.

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