La ruta de Morelos

Todo apunta a que Margarita González Saravia, candidata de Morena al gobierno de Morelos, mantiene una ventaja considerable sobre Lucía Meza, de la coalición PANPRIPRD. Tres encuestas en particular muestran una ventaja de hasta dos dígitos: Mitofsky con 12, Demotecnia ...

Todo apunta a que Margarita González Saravia, candidata de Morena al gobierno de Morelos, mantiene una ventaja considerable sobre Lucía Meza, de la coalición PAN-PRI-PRD. Tres encuestas en particular muestran una ventaja de hasta dos dígitos: Mitofsky con 12, Demotecnia con 22 y, de acuerdo con Mendoza Blanco y Asociados, del 27 de mayo, González Saravia aventaja por 20 puntos a Meza, quien apenas llega a 30%. Esto se repite a nivel nacional, en las que la candidata presidencial Claudia Sheinbaum lidera casi todas las encuestas, lo que lleva a prever una victoria inminente, tanto en el estado como en el país.

Esto ha “encendido” las alarmas en el equipo de Lucy Meza, llevándola incluso a promover sondeos de casas desconocidas, “hechos a modo”. Además, su campaña ha enfrentado serios desafíos que podrían afectarle. Por ejemplo, la renuncia de José Alberto Millán Toledo, excoordinador de Comunicación Social, acusado de violencia familiar, que incluye lesiones físicas severas en contra de su expareja –Denisse Molina– lo cual está en la carpeta de investigación 17910/FMUJ/UDVF/2020, iniciada en Oaxaca. La situación se complicó aún más cuando la víctima publicó un video con sus acusaciones y revelando que Meza estaba al tanto de los antecedentes de violencia de su colaborador.

El caso de Millán no es aislado: otros miembros del equipo de Meza también han sido relacionados con escándalos. La Fiscalía Especializada en Delitos Contra la Mujer de Oaxaca y colectivos feministas como Las Brujas del Mar han criticado la gestión de su campaña, principalmente sobre la seguridad y protección a mujeres víctimas de violencia.

Ello representa un desafío para Lucy Meza, quien a escasos días de la elección enfrenta las repercusiones de esas acusaciones mientras la confianza de los morelenses se diluye y los números no le favorecen. El triunfo en Morelos y a nivel nacional parece estar cantado.

CABALLO QUE ALCANZA…

En el “cuarto de guerra” del PAN de la CDMX preocupa una eventual derrota en la alcaldía Álvaro Obregón, territorio estratégico por ser el centro geográfico de la oposición a la 4T. Después de analizar diversas encuestas, los estrategas consideran que la candidata del PRI-PAN-PRD, Lía Limón, llegó a su “tope” en la intención de voto, mientras que su rival –el morenista Javier López Casarín– ha ido consolidando una tendencia al alza.

A ello habría que sumar los liderazgos sociales al proyecto de López Casarín, muchos de ellos ignorados o maltratados por la panista, siendo el más reciente el de Esther Mejía, excandidata de MC a la alcaldía. Cabe señalar que las descalificaciones de Limón “pegaron” fuerte en el electorado femenino, porque declaró que la exemecista “aportará más botox que votos a la 4T”. Fuerte señalamiento, sobre todo de parte de una mujer.

De confirmarse esta tendencia, Morena recuperaría la tercera demarcación chilanga más importante por el número de votos. Por lo pronto, ya se comenta un empate técnico entre Lía Limón y Javier López Casarín, quien logró en pocas semanas remontar de manera importante.

REPUNTA MORENA EN QUERÉTARO…

Se prendieron los focos rojos en la capital queretana con el “agarrón” de los candidatos del PAN, Felipe Fernando Macías, y el morenista José María Chema Tapia. Fue un encuentro de acusaciones de corrupción y enriquecimiento. Los panistas no dan crédito que Chema Tapia, un auténtico personaje desconocido hasta el año pasado, haya logrado “crecer” políticamente, lo que lo ha llevado a superar todas las encuestas, hasta colocarse como el candidato natural y con amplias posibilidades para arrebatarle la “corona” del Centro Cívico queretano.

En el debate, que fue un “encontronazo” de dos fuerzas o marcas, Chema Tapia se escabulló a través de propuestas. Hay preocupación en el partido que gobierna la capital queretana porque el morenista mostró “músculo” en su cierre de campaña del lunes con una convocatoria que desbordó los espacios asignados y no gustó para nada a sus adversarios.

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