Patria y vida

Ante las peticiones de apertura, el gobierno de Cuba hizo una demostración del poder represivo en las protestas de julio de 2021.

Ha pasado un año un día de las masivas protestas, que comenzaron de manera pacífica, del 11 de julio en Cuba y prácticamente no ha ocurrido nada en la isla. El gobierno de Miguel Díaz-Canel sigue reprimiendo como desde 1959, cuando comenzó esa dictadura.

Ese día, miles de jóvenes, casi de manera espontánea, comenzaron a comunicarse por un servicio de internet, que si no es el más deficiente del mundo, sí es uno de los más caros, para ir congregando cada vez a más personas de prácticamente todas las edades. En los extremos se detuvio lo mismo a pequeños de 12 años que a adultos de 68 años.

Salieron a la calle al grito de “patria y vida” para protestar por el racionamiento y hasta llegar a pedir un cambio por un gobierno democrático. Usaban la letra de la canción publicada en febrero de ese año en la que Yotuel Romero, Descemer Bueno, Maykel Osorbo (condenado por la canción a 10 años de prisión), El Funky y el grupo Gente de Zona, en la cual se cambia el lema de la revolución cubana “patria o muerte”, para expresar que llegó el tiempo de la apertura.

En su letra, lo mismo refieren a la detención del rapero Denis Solís y otros miembros del Movimiento de San Isidro, que a la necesidad de “destrabar el dominó/ tú tan 52 y yo 22”, dejando claro que la revolución se desgastó, está terminada y llegó el momento de cambiar. Pero nada cambió.

Se trata de la manifestación más grande que se haya congregado en el país desde la victoria de la Revolución, encabezada por Fidel Castro, realmente había muchos quienes albergamos la esperanza de un país más libre, democrático y justo para sus habitantes.

La gente salió a la calle con emoción y felicidad; regresó con sangre y dolor; lágrimas de rabia y desesperación. Impotencia de más de medio siglo. Fiel a su tradición, el gobierno reprimió con gran violencia a los opositores, lo mismo en las zonas donde comenzó la manifestación y hasta en el histórico malecón de La Habana.

El saldo de esa manifestación es de casi mil 500 detenidos, tanto durante la protesta como en los días siguientes. Ante una petición de apertura y democracia, el gobierno hizo una gran demostración del poder represivo. Quizá, como dirían los cronistas de box de los peleadores viejos: pueden perder facultades, pero la pegada nunca.

La canción Patria y vida ganó un Grammy, pero está prohibida escucharla en la isla. La necesidad de libertad y espacios democráticos en Cuba se mantiene latente, pero el gobierno de Díaz-Canel no está dispuesto a ceder.

La necesidad de tener patria y vida sigue siendo apabullada por el sexagenario grito revolucionario: patria o muerte.

POST SCRIPTUM

La música lo mismo sirve para ser un estandarte de la semilla de una revolución pacífica que deberá de darse en el corto plazo, que convertirse en un fenómeno social sin proponérselo.

Es muy posible que haya escuchado a alguien decir “Bebito fiu, fiu”. Una frase tan tonta como pegajosa que refiere al cover de TikTok de una canción de Eminem y Dido, Stan, refiriéndose a infidelidades del expresidente peruano Martín Vizcarra.

El autor dice que se trata de un clip que se salió de control porque se volvió viral en toda la región de habla hispana. Incluso el rapero Bad Bunny (quien es considerado, hoy por hoy, como uno de los cantantes más escuchados del mundo) cantó en un clip de redes sociales el estribillo de la canción.

Se trata de algo totalmente casero, con referencias que no buscan escapar al entorno de aquel país; sin embargo, se ha vuelto un fenómeno muy contagioso. Ojalá Patria y vida tuviera el mismo impacto.