Chipre en las Naciones Unidas
¿Qué tan exitosa ha sido la organización internacional en la resolución del conflicto?
Por Yael Siman*
Chipre ha tenido un lugar destacado en las Naciones Unidas, especialmente a partir de 1964 cuando Turquía amenazó por primera vez con invadir la isla mediterránea. Desde entonces, el Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU han emitido más de 100 resoluciones sobre la “cuestión de Chipre”. ¿Por qué Chipre ha recibido especial atención por parte de la ONU? ¿Qué tan exitosa ha sido la organización internacional en la resolución del conflicto?
En sus resoluciones, la ONU llama a los Estados a no tomar acciones o amenazas de acción que pudieran empeorar la situación en “la República soberana de Chipre” o que pudieran peligrar la “paz internacional”. La ONU condena cualquier interferencia o intervención extranjera, reitera la necesidad de mantener la “unidad” e “integridad” territorial de la isla y exige la “retirada inmediata” de todas las fuerzas de ocupación. La ONU creó la Fuerza de Paz para Chipre (UNFICYP, por sus siglas en inglés) para prevenir la violencia, mantener la ley y el orden.
Naciones Unidas concibe al conflicto entre Chipre y Turquía como un posible foco desestabilizador, no sólo de la región, sino también de la paz y la seguridad mundiales. Esta situación toma un nuevo cariz ante los hallazgos de gas natural cerca de la costa chipriota, la rearticulación de alianzas y el aumento de tensiones con Turquía. Las resoluciones del Consejo de Seguridad mencionan como Estados involucrados en la “cuestión de Chipre” no sólo a Chipre y Turquía, sino también a Grecia y Gran Bretaña.
Algunos de los temas de carácter humanitario incorporados en las resoluciones de la ONU han sido atendidos efectivamente. La invasión de 1974 provocó la reubicación forzada de cerca de 50 por ciento de la población de la República de Chipre. Sin embargo, el gobierno ha desarrollado un programa económico que ha logrado reubicar a un gran número de desplazados. Además, Chipre ha tenido éxito en la exhumación e identificación de los cuerpos de los desaparecidos de ambas comunidades en el conflicto (Kovras 2017).
No obstante, los buenos oficios de los secretarios generales de la ONU no siempre han dado frutos por la dificultad que entraña el definir una nueva estructura federal basada en una forma bizonal. La falta de implementación de las resoluciones de la ONU se debe a la influencia de las políticas de algunos de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad. Durante la Guerra Fría, Gran Bretaña y Estados Unidos no actuaron con base en los principios de la Carta de la ONU y del derecho internacional por sus necesidades estratégicas en el Mediterráneo Oriental y en Oriente Medio.
Turquía se encontraba en el centro de sus consideraciones, las cuales incluían la cohesión y efectividad de la OTAN, y el control de los estrechos. Después de la Guerra Fría, las consideraciones sobre energía, los oleoductos en el Mar Caspio, el surgimiento del fundamentalismo islámico y la crisis continuada en Oriente Medio tuvieron efectos similares en la política angloamericana en relación con Chipre.
No obstante, este fracaso de la ONU debe ser visto como algo parcial, dado el éxito que la organización ha tenido no sólo en cuestiones humanitarias, sino también en el mantenimiento de bajos niveles de violencia, a diferencia de otros conflictos de carácter territorial, nacional y étnico.
*Titular de la Cátedra A.G. Leventis para Estudio de Chipre,
Universidad Anáhuac México