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Sobreviven Marcelo y Claudia a Línea 12

Adrián Rueda

Adrián Rueda

Capital político

 

Apenas hace cuatro meses todo el mundo apostaba a que sus carreras políticas —o al menos la de uno de ellos— habían llegado a su fin; la opinión pública los culpaba del fatal accidente de la Línea 12 del Metro, que dejó 26 muertos y alrededor de cien heridos.

Esa situación recrudeció la pelea entre Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard por zafarse de la responsabilidad de la tragedia, que incluso fue fundamental para que Morena perdiera la Ciudad de México.

Este “incidente” —como lo llamó Claudia— abrió una grieta en el equipo cercano al Presidente, quien se vio obligado no sólo a defender públicamente a ambos, sino incluso a adelantar el juego de su propia sucesión para distraer a la opinión pública.

Y es que la jefa de Gobierno ordenó a la empresa noruega DNV realizar un peritaje del accidente, para esclarecer la responsabilidad sobre tantos muertos y heridos.

El primer golpe lo recibió Marcelo, después de que The New York Times publicara un adelanto del primer peritaje de los noruegos, que señalaba errores en el diseño y la ejecución de la obra, además de una pésima supervisión.

A nadie le cupo la menor duda de que la filtración de los datos que responsabilizaban al canciller provino del gobierno capitalino. El contraataque no tardó, y a la familia de Claudia le revivieron en los medios un viejo tema de supuestos fraudes financieros.

Como la cosa subía de tono, el Presidente decidió relevar a Sheinbaum de todo lo que tuviera que ver con la información del accidente y llamó a sus colaboradores a hacer las paces, en tanto se conocían los resultados.

Desde Palacio Nacional se operó para que los constructores de la obra se hicieran cargo —gratis— de la reparación.

Para salvarse de la quema, se intentó involucrar a Miguel Ángel Mancera y responsabilizarlo de que cuando paró la operación de la Línea 12 para rehabilitarla, quienes hicieron el trabajo sobrecargaron las trabes y por eso se vino abajo.

No calcularon que entre quienes hicieron esos trabajos hay constructores que hoy están apoyando en la rehabilitación, por lo que culpar al exjefe de Gobierno sería culpar a empresarios aliados de la 4T.

A pesar de todo ello, de ser desahuciados tras el accidente, Sheinbaum y Ebrard —en ese orden— puntean hoy las preferencias como probables candidatos de Morena a la Presidencia de la República en 2024, según diversas encuestas, entre ellas una del diario Reforma.

Y no es que esté mal que la 4T tenga a sus favoritos, desde luego, pero habrá que recordar que estos dos políticos fueron señalados como los principales responsables de la tragedia y hoy están más vivos que nunca, mientras el caso sigue sin culpables.

Una prueba más de que los mexicanos no tienen memoria… aunque hay que esperar si con el informe oficial del peritaje de los noruegos, que hoy se dará a conocer, se les refresca un poco.

 

CENTAVITOS

Si alguna esperanza le quedaba a Janecarlo Lozano de que el PRD se quedaría con los brazos cruzados, luego de traicionarlos para sumarse a Morena en el Congreso de la Ciudad de México, puede estar seguro de que no será así. Nora Arias, presidenta del sol azteca en la capital, anunció que promoverá su expulsión del partido, con lo que el legislador se quedará chiflando en la loma. Janecarlo no puede ser integrado a Morena, a menos de que los diputados decidan torcer la ley, por lo que se quedará solito como independiente… bueno, ni tan independiente, pues tendrá que servir los cafés y lustrar los zapatos a los morenos.

 

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