Edomex: sueño de la oposición
No le va a ser fácil a los partidos políticos contrincantes del Revolucionario Institucional ganar la gubernatura del Estado de México, a pesar de las alianzas que tanto publicitan. Menos aún, hacer realidad el tomar esta entidad como escalón hacia la Presidencia de la ...
No le va a ser fácil a los partidos políticos contrincantes del Revolucionario Institucional ganar la gubernatura del Estado de México, a pesar de las alianzas que tanto publicitan. Menos aún, hacer realidad el tomar esta entidad como escalón hacia la Presidencia de la República. De larga historia revolucionaria, esta entidad es por sí misma el punto central de la balanza electoral en la presente campaña presidencial.
No es sólo de ahora sino de tiempo atrás, incluso histórico , que el Estado de México es principio y fin de hechos trascendentes en la vida nacional. Anterior a la Conquista española los maltazintlas de la meseta central y los ocuictecas del sur, dominaron las tierras que más tarde entregaron a los tlahuicas de Cuauhnáhuac dándole al Tamoanchan dimensión considerable. Y como si diéramos un enorme salto calendario, recordemos que el Estado de México, tuvo una época que rodeaba territorialmente al Distrito Federal, creando un Estado de inquietud política en los que gobernaban la capital de la República.
En tiempos de Benito Juárez, el temor de no poder cruzar los obstáculos que eventualmente podrían poner los que gobernaban el Edomex hacia inquietante el ambiente de los poderes federales.
Entendido de ello, Benito Juárez planteó la necesidad de abrir una salida que representaba "seguridad nacional"; así, surgió el acuerdo y su consiguiente decreto del presidente Juárez creando, al sur de la ciudad de México, el estado de Morelos en una fracción desprendida del Estado de México, que hoy mismo colinda con éste y Morelos, siendo este el único paso geográfico de salida de la Ciudad de México.
Con el paso de los años, esta ha sido una entidad que se pudiera calificar de suerte política ya que ha tenido un buen número de gobernadores que en su momento supieron llevar a cabo un buen mandato. Hasta los años 40, el contagio con los acontecimientos nacionales provocaron inquietud política y violencia que llevó al asesinato del gobernador Zárate Albarrán, viéndose en la necesidad de intervenir el gobierno federal, que envió un substituto que lo fue el internacionalista Isidro Fabela, nacido en el poblado de Atlacomulco.
La presencia y la obra de Fabela abrió una etapa; fue buen gobernador, reconocido hasta nuestros días. Gracias a una política progresista en la que destacó la política fiscal, que le abrió las puertas a la gran industria que se asentó en el Valle, el Estado de México creció hasta colocarse como motor de la economía nacional, de tal suerte que miles de mexicanos que en sus lugares de origen no tenían como sobrevivir, emigraron hacia el Edomex, asentándose en el oriente y el noroeste, creando, en ciudad Nezahualcóyotl y Ecatepec los municipios más poblados del país y dándole a toda la región el calificativo de la zona conurbana más grande del mundo.
Todas estas circunstancias, le dan a los mexiquenses características especiales y una visión muy de ellos de la política, acrecentada en el hecho de que de sus entrañas surgió un Presidente de la República, Adolfo López Mateos. Otro hecho, es el de que la oposición nunca ha gobernado y que han sido los únicos partidos en el poder, los surgidos de la Revolución Mexicana, el PNR, el PRM y el PRI; esto, a pesar de que algunos jerarcas del panismo en los años 60–70 fueron originarios del Estado de México. El cuadro podría completarse con el resultado del censo de población recién dado a conocer por INEGI, en el que Edomex resulta ser la entidad más fuerte en materia económica e industrial, por encima de Nuevo León y también la más poblada.
Frente a este panorama, esta entidad se adivina la ambición de opositores que en sus cálculos, piensan puede ser el escalón para alcanzar la Presidencia de la Republica arrebatándole al PRI toda posibilidad de regreso, de allí su ansiedad por la negociación de alianzas. En este terreno el PRI también los adelanta ya que su antigua alianza con el Partido Verde Ecologista es ya, de forma y fondo sólida. ¿Que otra razón esgrime la oposición en su lucha por hacerse del Edomex?, una y más importante.
En la lista –no muy grande— de los aspirantes a la candidatura presidencial por el PRI sobresale Enrique Peña Nieto precisamente gobernador del Estado de México, cuyo mandato ha trascendido a todo el país y quien sin duda es el que encabeza la lista de buenos gobernadores a los que nos hemos referido. Ganar la gubernatura representaría para la oposición partidaria, enorme posibilidad de apoyo, para arrancarle la presidencia al PAN y detener el regreso del PRI.
La forma de gobernar y las obras realizadas le dan a Peña Nieto un solidó perfil y una no poca posibilidad de alcanzar sus propias metas. Ganarle al PRI —y a Peña la gubernatura— sería para la oposición un verdadero triunfo. Triunfo que sin embargo está muy lejos frente a la solidez priista de hoy en la entidad vecina.
*Periodista y escritor
