Cuando la reina Isabel II murió, el movimiento antimonárquico más importante del Reino Unido hizo lo que llevaba años planeando hacer tras su muerte: adoptó un perfil bajo.
Republic, un grupo fundado en 1983 que hace campaña a favor de un jefe de Estado elegido y busca abolir la monarquía, publicó en cambio una breve declaración de condolencias a la familia real en la que reconocía su derecho a estar de luto.
La actividad normal se reanudó dos días después de la muerte, cuando Republic criticó la sucesión formal al trono del rey Carlos III, por considerarlo antidemocrático.
Dejemos que todo esto siga su curso y ya nos ocuparemos de las cosas más serias después”, dijo Graham Smith, director general de Republic.
El Partido Verde, uno de los pocos partidos políticos británicos que incluye en su manifiesto la oposición al papel político de la monarquía, calificó la muerte de la reina como “un momento de gran tristeza para nuestra nación”.
Algunos ven oportunidades en cuanto sepulten a la reina y los ciudadanos se concentren en Carlos.
Haremos una gran campaña desde poco después del funeral hasta la coronación. La reina era un escudo térmico que desviaba muchas críticas y eso no lo logra Carlos”, dijo Smith.
El republicanismo está aumentando entre la generación más joven de británicos.
Los republicanos quieren sustituir al rey o la reina hereditarios por un presidente elegido.
El 41% de los británicos de entre 18 y 25 años dijo que quería un jefe de Estado elegido, según las encuestas de 2021, quince puntos porcentuales más que en 2019. Reino Unido ha estado dirigido por una monarquía hereditaria durante más de nueve siglos, salvo un breve periodo de gobierno republicano en el siglo XVII.
Aunque los monarcas cedieron de manera gradual el poder de gobierno al Parlamento a lo largo de los siglos, éste sigue gobernando en nombre del monarca y el rey o la reina siguen desempeñando un papel significativo, aunque simbólico casi en su totalidad, en importantes funciones británicas: la transición de un gobierno a otro, la administración de la Iglesia de Inglaterra y el sistema judicial.
Por ahora, la mayoría de los republicanos británicos esperan su momento.
El domingo pasado, un manifestante interrumpió en Oxford una proclamación sobre el ascenso del rey, y fue detenido.
Otro inconforme fue arrestado en Edimburgo. Fuera de eso, hasta ahora, los republicanos han dejado las calles en manos de dolientes y simpatizantes.
CARLOS CELEBRA AFECTO MUNDIAL
El rey Carlos III de Inglaterra y el resto de la familia real expresaron estar conmovidos por las muestras de afecto en el mundo tras la muerte de la reina Isabel II de Inglaterra.
La Casa Real quiere expresar su sincera gratitud por los mensajes de condolencias recibidos”, expresó la monarquía británica en un comunicado.
Ayer, el recién proclamado monarca se tomó un día de “contemplación”, luego de recorrer el Reino Unido tras el deceso de la monarca el pasado 8 de septiembre.
Carlos III se retiró a su propiedad de Highgrove el miércoles por la noche después de dejar a su esposa, la reina consorte Camilla, de 75 años, en su mansión en Wiltshire.
Se trata de la primera vez que la nueva pareja real regresa a sus propiedades tras el fallecimiento de Isabel.
El principal homenaje ciudadano a Isabel II arrancó el miércoles pasado en Londres con la apertura de una capilla ardiente que permanecerá abierta de forma ininterrumpida durante casi cuatro días.
El lugar donde reposa la reina cerrará el próximo lunes, horas antes del funeral de Estado.
-DPA
cva
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