360 grados; 8D de música

CIUDAD DE MÉXICO.

La música no sólo son sonidos entrelazados por ritmos y armonías, sino que además puede ser una experiencia para las personas. A partir de ello, los dedicados a su creación han buscado diferentes formas de que la actividad sea diferente y, en ocasiones, única.

Músicos, productores, ingenieros de audio y todo aquel envuelto en la industria han buscado llevar la experiencia más allá. Desde The Beatles con Sgt. Pepper’s Lonely Hearts, a Queen con A Night at the Opera, pasando por artistas como David Bowie con The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars, Led
Zeppelin con su primer disco y Pink Floyd con The Final Cut, todos han experimentado con el sonido de sus creaciones para convertirlas en piezas únicas y consagradas. En este ejercicio de experimentación, y en pleno siglo XXI, la música está encontrando un nuevo campo de cómo llegar al oído humano: el sonido 8D.

Son los YouTubers los que han encontrado en la era digital un espacio virgen donde el 8D puede convertir cualquier canción o video en una experiencia completamente nueva en el cerebro de quien la escucha.

El 8D es un formato de audio que trata de emular la realidad —siempre y cuando se escuche con audífonos— logrando que las ondas se manipulen para que parezca que el sonido llega de varios puntos, lo que el cerebro trata de procesar creando así un nuevo momento al escuchar la música.

La idea es que para percibir si el sonido está en la izquierda o derecha, el cerebro lo que hace es comparar, introduciendo un retardo. Si tenemos un sonido a la derecha llegará antes a ese oído y, después de ese retardo, llegará a la izquierda.

El cerebro, entonces, localiza dónde está el sonido. De alguna forma es como si se colocara una caja de resonancia dentro del cráneo de las personas”, explicó Loren Alloza Pascual, técnico de Silent Technology, al diario español ABC y quien considera que utilizar 8D como nombre de esta nueva tendencia es erróneo, ya que es un sonido tridimensional.

Desde hace casi un año canales de YouTube como Trillion, 8D Tunes, Aviion Music y 8D Sounds han inundado la plataforma con canciones de reconocidos artistas que, al llegar al cerebro a través de los audífonos, se reinventan en una vivencia que podría compararse con tener un sonido en 360º dentro de la cabeza y aquellos que buscan nuevas opciones lo han disfrutado.

Feels Good Inc. de Gorillaz ha alcanzado más de 27 mil vistas en Aviion Music; Don’t Care, de Ed Sheeran y Justin Bieber, ha logrado más de 531 mil visitas en 8D Tunes; Believer, de Imagine Dragons, ha logrado más de 24 millones de reproducciones en 8D Tunes, y On My Way, de Alan Walker, Sabrina Carpenter y Farruko ha logrado más de un millón 300 mil plays en 8D Sounds. Incluso Thalía, junto con la española Ana Mena, se unió a esta tendencia lanzando el tema Ahí, el cual tiene casi un millón de vistas en el canal de la mexicana.

No esperé las reacciones que desató el 8D. Cuando subí Believer de los Imagine Dragons hace unos meses no pensé lo que iba a pasar, ahora tiene más de 24 millones de vistas, me sorprendió muchísimo.

El sonido lo descubrí por primera vez en 2017 cuando escuché Faded, de Alan Walker, y me impresionó porque parecía que la música estaba alrededor mío, como si estuviera en un concierto o en otro lugar usando sólo mis audífonos”, dijo a Mel Magazine, el colombiano Samuel Correa, quien dirige y crea contenidos en este formato para el canal 8D Tunes.

Tras el lanzamiento de este tema, Gavin, quien controla y crea contenido para Aviion Music, comenzó a experimentar con diferentes canciones hasta encontrar la mejor forma para crear el 8D.

Para el chico, quien prefiere que se refieran a él sólo como Gavin, el 8D es una opción nueva para experimentar la música, ya que da un giro completo; es decir, de estar acostumbrados a escucharla de forma lineal, el 8D hace que en la cabeza parezca que la música flota en diferentes direcciones.

Después de escuchar el sonido único que había en 8D Tunes y Trillion decidí que tenía que intentarlo en mi propio canal. Mucha gente no sabe que he estado manejando Aviion Music desde hace más de dos años, pero comencé a subir canciones en 8D apenas hace nueve meses.

8D es algo relativamente nuevo en lo que se refiere a la producción de sonido y lo que hace es que juega con esa parte del cerebro que se dedica a ubicar de dónde vienen los sonidos. Por décadas todos hemos escuchado música de una forma estática, la cual proviene de una o dos fuentes de sonido, por eso cuando escuchas el 8D por primera vez esa parte de tu cerebro como que se ilumina y comienza a ‘ver’ de dónde proviene el sonido. La verdad es algo muy cool”, dijo en entrevista con Excélsior.

Gavin considera que, a pesar de que hay diferentes maneras de producir el 8D, en realidad es muy sencillo, ya que la música se pasa por un filtro que logra el efecto... lo que en los 80 se llamaba sonidos holofónicos, una técnica de especialización sonora creada por Hugo Zuccarelli y que le dio pie al sonido 3D o tridimensional, que es básicamente el nombre previo al 8D.

El joven también piensa que este ‘nuevo’ formato de audio es una manera de refrescar los medios actuales en donde, desde su perspectiva, hay poca innovación en cuanto a la
creatividad.

Las canciones no necesitan ser o tener algo específico para que puedan ser creadas o transformadas a 8D, cualquier canción puede sonar así; incluso videos viejos, si tienen audio, pueden convertirse.

El 8D es popular porque es diferente. En este momento, desde mi opinión, hay pocas innovaciones en los medios. Nuestra música se ha vuelto mucho más simple, las películas se han vuelto repetitivas o muchas de ellas son remakes de películas que ya se hicieron y la industria de los videojuegos sólo interesa generar ganancias con productos a medio terminar y todos hemos terminado aceptando eso.

No estoy diciendo que haciendo 8D vaya a cambiar el mundo, pero creo que todos anhelamos un cambio en los medios y el 8D de alguna manera está transformando la manera de vivir la música”, concluyó.

Sonido Surround no es 8D

El sonido surround es una técnica que consiste en enriquecer la calidad de la reproducción sonora de una fuente de audio con canales adicionales provenientes de altavoces que envuelven al oyente, proveyendo sonido en un radio de 360° en el plano horizontal (2D).

Se caracteriza por tener una posición particular con respecto al oyente, en la cual los efectos del audio funcionan de manera óptima y presenta una perspectiva fija del campo sonoro a la persona que se encuentra en dicha ubicación.

Esto incrementa la percepción del espacio sonoro por medio de la explotación de la localización del sonido y se logra por medio del uso de múltiples canales de audio discretos enviados a un arreglo de altavoces.

Es un sonido lineal que se puede percibir en una ubicación física y sin audífonos, a diferencia del 8D que es un sonido tridimensional que sin auriculares no es perceptible.