Ghosting laboral: qué es y cómo afecta a quienes buscan empleo

El ghosting ya no se limita al ámbito personal. Hoy también está presente en el mundo laboral y, según datos de la plataforma de empleo Indeed, cada vez más empleadores y trabajadores recurren a esta práctica. Pero ¿qué es el ghosting laboral y cómo afecta a quienes buscan empleo?

El ghosting laboral no solo impacta la relación entre empleadores y trabajadores, sino que también refleja los cambios en las dinámicas de trabajo actuales, donde factores como el bienestar, las expectativas de crecimiento y la flexibilidad pesan más en la decisión de aceptar o mantener un empleo.

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¿Qué es el ghosting laboral?

El término ghosting proviene del ámbito social y se refiere a cortar toda comunicación con otra persona sin dar explicaciones. 

En el entorno laboral, el ghosting ocurre cuando un aspirante deja de asistir a entrevistas de trabajo o, en casos más graves, cuando tras aceptar una oferta laboral y firmar un contrato no se presenta a su primer día de labores.

Aunque para el empleado puede parecer una salida sencilla, este comportamiento tiene repercusiones importantes en su trayectoria profesional y genera pérdidas a las empresas que ya habían invertido tiempo y recursos en su contratación.

¿Por qué se presenta esta práctica?

El ghosting laboral está vinculado a múltiples factores que van más allá de un simple desinterés. Entre las razones más comunes destacan:

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• Insatisfacción con el ambiente laboral.
• Ofertas más atractivas de otras compañías.
• Falta de reconocimiento y escasas oportunidades de desarrollo profesional.
• Problemas con el liderazgo o la dirección.
• Sobrecarga de trabajo y ausencia de equilibrio entre vida personal y laboral.
• Incumplimiento de promesas hechas durante el reclutamiento.
• Cambios en la estructura o cultura organizacional.

Expertos señalan que, en muchos casos, esta conducta surge cuando los trabajadores no confían en que expresar sus inconformidades servirá para mejorar su situación, por lo que optan por cortar todo contacto sin dar explicaciones.

Consecuencias del ghosting para empresas y empleados

Las consecuencias del ghosting laboral son bidireccionales.

Para los trabajadores, el ghosting puede dañar su reputación profesional. Reclutadores y empresas suelen compartir experiencias, lo que podría dificultar futuras contrataciones o cerrar puertas a oportunidades más atractivas.

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Para las empresas, implica pérdida de tiempo y recursos en procesos de selección, además de un impacto negativo en la imagen del empleador. Esto dificulta la atracción de talento y eleva la rotación, un problema especialmente costoso en sectores con alta especialización.

¿Cómo afecta a quienes buscan empleo?

El ghosting también ocurre del lado de las empresas hacia los candidatos. Cuando un postulante invierte tiempo en entrevistas y pruebas sin recibir respuesta, puede enfrentar:

1. Frustración, ansiedad y desgaste emocional.
2. Pérdida de tiempo y recursos invertidos en el proceso.
3. Reducción de expectativas salariales al sentirse en desventaja.
4. Disminución de confianza y motivación para seguir buscando empleo.

Este tipo de prácticas refuerzan la desconfianza hacia los reclutadores y deterioran la relación entre las compañías y los profesionales en busca de oportunidades.

¿Cómo prevenir y manejar el ghosting laboral?

Para reducir este ghosting laboral, tanto empresas como empleados deben apostar por una comunicación más clara y transparente. Algunas medidas recomendadas son:

• Establecer procesos de retroalimentación continua y canales abiertos de comunicación.
• Ofrecer planes de desarrollo profesional y programas de bienestar que generen compromiso.
• Realizar entrevistas de salida para identificar problemas y prevenir futuras deserciones.
• Implementar esquemas de flexibilidad laboral que permitan equilibrar la vida personal y profesional.
• Diseñar políticas claras de renuncia y transición que formalicen la salida de un trabajador.

Al mismo tiempo, los candidatos deben asumir una postura profesional y notificar oportunamente a las empresas cuando deciden abandonar un proceso, evitando afectar su reputación a largo plazo.