Le ha quedado grande el paquete
La Liga MX se encuentra a tres jornadas de la finalización de la fase regular del campeonato y, con todavía muchas cosas por decidir, uno de los habituales contendientes a la corona tendrá a su tercer director técnico dirigiendo al primer equipo en el Clausura 2023. El ...
La Liga MX se encuentra a tres jornadas de la finalización de la fase regular del campeonato y, con todavía muchas cosas por decidir, uno de los habituales contendientes a la corona tendrá a su tercer director técnico dirigiendo al primer equipo en el Clausura 2023. El domingo por la noche, la directiva de los Tigres anunció la salida de Marco Antonio Ruiz tras la dolorosa derrota ante el colero de la competencia un día antes. Tras un gran arranque con Diego Cocca en la dirección, y buenos resultado con el nuevo entrenador en sus primeras jornadas al mando, la Autónoma de Nuevo León se ha ido en picada y, salvo por la calificación en octavos de la Concachampions y el triunfo en la ida de cuartos del mismo certamen ante el Motagua, poco ha funcionado recientemente, sumando cuatro derrotas consecutivas en liga y sólo dos victorias en los últimos ocho partidos disputados en ambas competencias.
Por ello, Ruiz ya nos es más el director técnico y Robert Dante Siboldi fue nombrado su sucesor un día después. Lo que espera la directiva es una reacción de un grupo de jugadores que no han rendido al nivel deseado, que están entre los más costosos del certamen, repleto de jugadores de renombre, pero que ya desde hace tiempo se ha quedado lejos de las expectativas; los Tigres están por cumplir cuatro años desde su más reciente título. Para una institución que gasta tanto, que se convirtió en protagonista de la Liga MX y se jacta de estar entre los grandes de nuestro futbol, esos resultados están lejos de lo ideal y de satisfacer a una afición que se acostumbró a que disputaran finales de manera constante.
La paciencia fue poca y ahora, con el cambio de timón, la esperanza es poder salvar una campaña que prometía mucho y que hoy los tiene en la mediocridad, con 21 puntos conseguidos de 42 disputados. Llaman la atención las decisiones de los directivos, que primero, por sentir su orgullo golpeado, decidieron que Cocca no terminara el torneo con ellos y, después, le dieron la dirección del club a alguien sin experiencia a este nivel, esperando que pudiera manejar un plantel lleno de futbolistas con demasiado peso al interior del vestidor y que no aportan regularmente lo que de ellos se espera. Entiendo que el momento era complicado, pero lo sucedido demuestra que, hasta en las instituciones de mayor importancia del futbol local, la improvisación ocurre y la estabilidad que por años existió en la U de Nuevo León con Ricardo Ferretti se ha perdido.
Hasta ahora, Mauricio Culebro no ha podido con el paquete de mantener a los Tigres en el lugar que se habían ganado, fallando en su proyecto anterior con Miguel Herrera y manejando mal la situación que se le presentó tras lo ocurrido con el ahora técnico nacional. Obvio, están a tiempo de salvar el semestre, pero, en caso de no ganar la octava corona, sumará otro fracaso al frente de la U de Nuevo León.
