El mejor del mundo
Hace casi una semana el deporte vivió una gran hazaña, el parque de pelota de los Marlines fue el escenario en el que Shohei Ohtani hizo historia, inaugurando el club de los 50 cuadrangulares y 50 bases robadas. Esa ya histórica tarde de jueves vio al extraordinario ...
Hace casi una semana el deporte vivió una gran hazaña, el parque de pelota de los Marlines fue el escenario en el que Shohei Ohtani hizo historia, inaugurando el club de los 50 cuadrangulares y 50 bases robadas. Esa ya histórica tarde de jueves vio al extraordinario pelotero nipón lograr algo que hace unos años era impensado en el beisbol.
El jugador de los Dodgers se encontraba en la antesala de conseguir el fantástico logro, y con una actuación que ya está en los libros de récords logró arribar a la marca que persiguió desde hace semanas, llegando a una inevitable cita con la historia.
Desde su llegada a Estados Unidos hace siete años, su talento quedó rápidamente en evidencia, para que a partir de 2021 no quedara duda alguna acerca de su estatus como un jugador singular en la historia, compaginando su trabajo al bat con 124 cuadrangulares en ese periodo, con el pitcheo, en el que su efectividad fue magnífica, tanto en las carreras limpias admitidas, como en los hits y bases por bolas permitidos por episodio, así como en relación de ponches contra bases por bolas.
Ohtani se había acercado a los 50 cuadrangulares en un par de ocasiones, bateando 46 en 2021, y 44 en 2023, por la que sabíamos que tenía la capacidad de llegar a ese número, aunque hay que decir que al llegar a la importante marca se unió a un grupo no tan grande de campañas con 50 vuelacercas, ésta es curiosamente apenas la quincuagésima ocasión que ha ocurrido en Grandes Ligas; para ponerlo en perspectiva, Barry Bonds únicamente superó esa cantidad en una ocasión, lo hizo en su temporada del récord de 73 en 2001.
Lo más extraordinario de su logro es el salto en cuanto a bases robadas, ya que 26 era el máximo de su carrera en Estados Unidos. Si además tomamos en cuenta su físico, entonces es más sorprendente, ya que mide más de 1.90 y pesa unos 100 kilos, para nada el prototipo de un gran robador. Pero la combinación de poder y velocidad a este nivel nunca había sido visto, entre los miembros del muy exclusivo club 40/40, el que más home runs había conectado fue Alfonso Soriano, con 46 y 41 robos, mientras que el de más robos fue Ronald Acuña Jr. el año pasado con 73, pero únicamente 41 cuadrangulares; de hecho, pensando en jugadores con 50 home runs en un año, los que más bases se habían robado eran Willie Mays y Alex Rodríguez, con 24.
Si agregamos lo que hizo el día en que alcanzó el 50/50, entonces la hazaña cobra mayor relevancia. Esa tarde en el sur de Florida, bateó seis veces y en todas conecto al menos imparable, incluyendo tres cuadrangulares y sumando dos bases robadas, algo que nunca se había logrado en un partido, e impulsó diez carreras, marca histórica para un primer bat. No tengo dudas, Ohtani merece el MVP de la Liga Nacional, porque sin él Los Ángeles no estaría en la posición en que se encuentra.
