Recta final

Desesperación. Atizar el fuego. Lo que sea que funcione para calentar los ánimos y llamar a su base a que no lo abandone y salga a las casillas. Así serán los próximos días para Donald Trump. Total, es su base uno de los grupos que más apoyan la reactivación y el desconfinamiento.

Anoche se realizó el último debate presidencial en Estados Unidos. Al momento en que se escriben estas líneas, faltan minutos para su inicio en Nashville, Tennessee.

Y, a pesar de lo poco que falta para el día de la elección, las encuestas no resultan del todo confiables, menos aún tras lo ocurrido en 2016, cuando vaticinaban un éxito demócrata en las urnas que fue rebasado por el sistema electoral que dio el triunfo a Donald Trump.

*

Hillary Clinton, a pesar de ser Hillary Clinton, perdió la presidencia a manos de quien parecía una broma, un personaje de un reality show al que olvidaríamos tan fácilmente como cuando cambiamos de canal.

Hoy tenemos factores que antojan complicada la reelección, todos creados por la misma administración trumpista: movilizaciones y protestas sociales por abuso policial y el discurso de odio que alimenta todos los días; los golpes financieros y los escándalos sobre su manejo fiscal; sus ataques constantes a la prensa; el manejo de la pandemia y todas sus consecuencias, del número de muertos al desempleo; su política exterior, con frentes por todos lados, con la OMS, China, con el Grupo de los 7. Pero no sabremos el alcance real de ellos hasta que tengamos cifras y un resultado.

*

El proceso electoral estadunidense es impredecible. Por ahora sólo podemos enumerar las tantas fallas y elementos en contra de un presidente que ha estado muy lejano a la función de quien ocupó antes la Sala Oval.

Esta semana cumplió su amenaza y rompió el acuerdo con 60 minutos al revelar completa la entrevista que dio por terminada de manera abrupta y que estaba programada para este domingo. Acostumbrado a hablar para su cadena de confianza, Fox News, antes había optado por evidenciar a Lesley Stahl, de la cadena CBS, y eligió señalar que durante su estancia en la Casa Blanca la periodista no portaba cubrebocas.

El presidente que tras su contagio de covid-19 salió al balcón y se quitó la mascarilla, el que sugirió inyecciones de desinfectante, ése mismo intentó asestar un golpe a un medio que constantemente lo ha cuestionado a través del uso de cubrebocas y con un video que no rebasa los seis segundos.

*

La actitud fanfarrona de Trump no arremetió tanto contra sus frentes electorales ya conocidos, como el migratorio, pero se compensa con la que tuvo frente a la pandemia y que lo evidenció con el mundo entero.

El presidente que minimizó el virus y convirtió a su país en el más afectado, sabe que, más allá de la política, lo que necesita es hablarle a su base para mantener encendido su movimiento. El tema es que el 3 de noviembre lo que está en juego es si esa base le alcanza para quedarse en la Casa Blanca.

No está en condiciones de convencer a nadie, si es que alguna vez lo estuvo, menos aun cuando el mundo no está para personajes que nunca debieron salir de los memes.