La masiva llegada de rusos a Argentina

Hace tres meses, empecé a leer en los principales diarios argentinos sobre la noticia de un importante número de rusos que estaba entrando a Argentina de manera sigilosa, repetitiva y con los mismos fines que otros rusos. La migración recibirá el mismo motivo o respuesta de la visita a suelo argentino.

Desde noviembre pasado, comenzaron a salir los primeros reportes por parte de las autoridades federales migratorias argentinas sobre la repetitiva llegada de prominentes grupos de ciudadanos rusos a territorio argentino, los cuales volaban ya sea desde distintas partes de Europa o desde Etiopía, África; haciendo escala en Brasil o en algún país sudamericano, para poder arribar al Aeropuerto Internacional de Ezeiza en Buenos Aires. De igual manera, algunas familias o grupos de rusos ingresaban a territorio argentino desde las fronteras terrestres con Brasil. No era normal lo que sucedía.

El hecho sería intranscendente si no fuera porque desde septiembre pasado muchos rusos y sus familias han tratado de salir de territorio ruso debido a la movilización militar que realiza el gobierno del Kremlin para la guerra en Ucrania. También, esto sería algo habitual si no fuera porque muchas rusas embarazadas y sus familias llegan a Argentina a escasos meses de que vayan a dar a luz o realicen su parto. De igual manera, nada de esto sería anormal si no fuera por los últimos casos de detenciones de espías rusos con pasaportes argentinos en Eslovenia o en Brasil.

En grupos de WhatsApp, Telegram y páginas web, existen tips, recomendaciones y se venden paquetes especiales para familias y para las mujeres que requieran dar a luz en los próximos meses después de su arribo a Argentina. Los costos oscilan entre los 15 y 25 mil dólares ya con hospedaje, clases de español, documentos legalizados de residencia, pasaportes, clínicas y hospitales para los partos de las futuras madres. Dentro de esto, ya se han dado casos de fraude y empresas falsas que han sido desmanteladas por la Policía Nacional Argentina.

La práctica más común y que comienza a llamar la atención de las autoridades migratorias argentinas es el hecho de que un porcentaje prominente de rusas embarazadas da a luz para que su hijo o hija reciba la nacionalidad argentina, y por ende, la mamá y la familia pueda obtener el pasaporte argentino. El 70% de estos casos recae en abandonar el país después de algunos meses de recibir documentos, pasaportes y de haber dado a luz. En redes sociales, rusas con esta experiencia dan consejos y recomiendan que lo mejor es parir en Argentina, obtener la ciudadanía argentina y salir del país para establecerse en otro. Por estos hechos, las autoridades argentinas estudian quitar la ciudadanía a las familias o castigar estos hechos.

Por otra parte, existen los grupos de rusos que deciden quedarse con sus familias en territorio argentino, principalmente dentro de Buenos Aires y en colonias que no quedan muy lejos del centro como Palermo, La Recoleta, Puerto Madero, Parque de las Heras o San Telmo.

Ante esto, las autoridades federales han empezado este año a rechazar la entrada de varios ciudadanos rusos, también se habla de detenciones de rusos por parte de policías argentinos para revisar sus documentos. La embajada rusa en Argentina, por su parte, se queja de que comienza a haber discriminación y rusofobia en el país sudamericano.

Las familias rusas huyen de un país en guerra, para llegar a uno con tres dígitos de inflación.

¡Qué ironía!