¿Golpe de Estado en Bolivia?
En los últimos años, han aumentado de manera progresiva los problemas dentro de Bolivia en lo político, social y económico; por lo tanto, el interés ha comenzado a crecer sobre qué podría pasar con el gobierno de Luis Arce y el activismo de Evo Morales en la ...
En los últimos años, han aumentado de manera progresiva los problemas dentro de Bolivia en lo político, social y económico; por lo tanto, el interés ha comenzado a crecer sobre qué podría pasar con el gobierno de Luis Arce y el activismo de Evo Morales en la política nacional.
Las divisiones políticas entre el presidente Arce y el expresidente Morales se han incrementado desde el 2021 debido al protagonismo interno de Morales y al revanchismo, que lo ha nutrido para quedarse con el liderazgo del MAS, como también de autoproclamarse candidato de su partido a la Presidencia de Bolivia para las elecciones generales de 2025, aun sabiendo que constitucionalmente no puede hacerlo.
En varios mítines, Morales ha reiterado que se postulará para las elecciones generales de 2025 “a la buena o a la mala”, provocando preocupación, descontento y abonando a una crisis económica repleta de huelgas; escasez de dólares y de combustible; al igual de intervenciones o paralizaciones en el Poder Legislativo y en el Poder Judicial.
Ante esto, la popularidad del presidente Arce ha bajado dramáticamente y ha perdido apoyo entre sus partidarios como entre la élite del MAS. También, mientras las cosas van en picada, Arce ha alertado en varios eventos a su gabinete sobre un posible “golpe blando” a su gobierno.
Morales, por su parte, mientras continúa su lucha por ser de nueva cuenta candidato presidencial, se ha victimizado declarando que hay un “plan negro” en su contra liderado por el grupo militar Pachajcho, de quien es supuestamente líder el comandante y militar Juan José Zúñiga, personaje elemental del miércoles pasado en el Palacio Quemado y del supuesto golpe de Estado contra el gobierno de Luis Arce.
Juan Zúñiga es y ha sido de manera muy abierta un crítico de Evo Morales a través de los últimos años. En reiteradas ocasiones se han hecho públicas las críticas y el descontento que genera Morales para él y para un grupo de militares.
Zúñiga se desempeñó desde 2022 como jefe del ejército boliviano y fue alguien que generó confianza en Arce, aun sabiendo de algunos escándalos de corrupción dentro de las filas castrenses.
Supuestamente, Zúñiga y otros militares amasaron poder dentro del ejército provocando una preocupación discreta dentro del gobierno sin hacer mucho revuelo.
Con el poder y el liderazgo dentro del ejército nacional, Zúñiga empezó a hablar de más en los últimos días mostrando su descontento ante lo que pretende hacer Evo Morales para el próximo año.
Para no generar desestabilización, Luis Arce relevó el martes de su cargo a Zúñiga sin dejar a nadie en el cargo. En general, no quedó claro qué se hizo o si Zúñiga atendió la orden presidencial.
El miércoles se efectuó un presunto golpe Estado de sólo tres horas que, aparentemente, fue orquestado por una facción leal al comandante Zúñiga, pero que resultó en un fracaso y ridículo internacional.
Durante el golpe de Estado, el mandatario boliviano nombró a un nuevo jefe del ejército boliviano, el cual dio la orden de que se retirara la facción del comandante. Consecuentemente, todos se fueron en vehículos blindados y abandonaron tranquilamente la Plaza Murillo regresando a sus bases. No queda claro por qué Zúñiga se retiró, no se defendió y se entregó horas más tarde dejando a Luis Arce como la víctima principal de Bolivia.
¿Se hizo un ridículo internacional para salvar la popularidad del presidente Luis Arce ante el posible ascenso de Evo Morales? ¿Fue un autogolpe de Estado? Si no es eso, no sé qué pueda ser.
