Herencia magnánima

Después de que en marzo de 2019, el Consejo Universitario de nuestra máxima casa de estudios designara como profesor emérito de la Facultad de Derecho, al jurista, maestro, investigador, político, exservidor público y gran difusor de la cultura, Sergio García Ramírez; en una reunión muy grata, me preguntó cómo podía expresar y retribuir el enorme agradecimiento que tenía hacia la institución que lo formó.

Y le sugerí: ¿Por qué no escribe una historia de su Facultad?

Él sabía que la última gran obra clásica escrita sobre ese tema fue la de don Lucio Mendieta y Núñez, que había abarcado desde su fundación, cuando un 12 de julio de 1553 se pronunció la cátedra Prima de Leyes Instituta por Bartolomé de Frías y Albornoz, pero que concluye hasta 1954, quedándose hasta la transformación de la Escuela Nacional de Jurisprudencia en la Facultad de Derecho y después de que se había inaugurado el nuevo edificio en Ciudad Universitaria.

Aunque argumentó que era una tarea difícil dar continuidad a una obra tan icónica, de inmediato aceptó con entusiasmo “embarcarse en esa difícil travesía”, como le gustaba referirse en sentido figurado a muchas cosas.

Invitó a participar como coautora a la gran historiadora —y doctora en Derecho— Elisa Speckman, a quien durante la travesía habría de elegir la universidad como directora del Instituto de Investigaciones Históricas.

Ambos se pusieron manos a la obra. Se tuvieron que enfrentar a la falta de archivos sistematizados y se dieron a la tarea de acopiar un sinnúmero de datos, archivos, documentos, libros, fotografías y versiones testimoniales de muchos grandes maestros para poder reconstruir el devenir histórico de estas casi siete últimas décadas de la institución.

Los últimos días de diciembre pasado, la directora de Tirant lo Blanch en México, María Goerlich, nos avisó que después de tres años de arduo trabajo, por fin estaba listo el libro. De inmediato le llamé a don Sergio para felicitarlo por las fiestas decembrinas; comentar su último viaje a Italia a donde acudió a recibir un merecido reconocimiento de La Sapienza, Universidad de Roma; y a programar la presentación de la obra.

La vida y el tiempo ya no le permitieron estar en la presentación de su último libro, del cual estaba muy orgulloso.

El pasado jueves, en el magnífico escenario cultural que representa la Feria Internacional del Libro, en el bello e imponente Salón de Actos del Palacio de Minería, se verificó la presentación del libro: Contribución a la historia de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México, evento que se convirtió en algo mucho más importante: rendir un homenaje póstumo a la memoria del artífice principal de este logro editorial.

Gracias a la doctora Speckman y al doctor García Ramírez, hoy se puede conocer la historia de una institución a la que nuestro país le debe tanto y sin la cual no podría entenderse.

El libro Contribución a la historia de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México está destinado a ser al tiempo testimonio de la vida de una institución, pero también es una herencia magnánima que nos deja uno de sus más grandes maestros: don Sergio García Ramírez. Aquel que a través de su conocimiento nos enseña día con día a ser libres; nos recuerda que los sueños son la materia que ilumina la inteligencia.

Como Corolario las palabras del doctor Sergio García Ramírez: “Es tiempo, como fueron todos, de pugnar por la única grandeza que nos abarca: la grande patria. No magnitud del cuerpo; sobre todo dimensión del alma. Del alma calificada: grandeza del alma mexicana”.