Nuevo León tiene Alma

Es el estado con menor carencia, garantizando el acceso a la salud a 85% de su población.

Juana Ramírez

Juana Ramírez

El arco de Juana

 

 

Es imposible hablar de bienestar social sin considerar el acceso oportuno a los servicios de salud para la población. En Nuevo León, la doctora Alma Rosa Marroquín, secretaria de Salud de ese estado, empezó su gestión preguntándose ¿quiénes y cómo se accede realmente a hospitales públicos en busca de consultas, medicamentos o cirugías?, ¿qué se necesita para mejorar los indicadores de salud de la población sin que ello represente un gasto para las familias?

Así nació Cuidar tu salud, la columna vertebral de un plan de salud que se fundamenta en la responsabilidad compartida: el gobierno garantiza servicios gratuitos y de calidad, mientras las personas cuidan de su propia salud. Esto es un cambio de paradigma: “Ya no atendemos pacientes, cuidamos personas”, dice la doctora Marroquín.

“Recuerdo la primera reunión con el equipo. Presenté la tarjeta Cuidar tu Salud, con las características propias que la integraban: el registro del nombre de la persona titular, un código QR para vincularla al expediente electrónico. Expliqué cómo esta herramienta permitiría mejorar la planeación, el seguimiento, el análisis de información y la comunicación con los usuarios. Y encontré incredulidad: ¿Para qué? Eso ya existe”. Alma Rosa entendió que la desconfianza empezaba en casa y que necesitaba hacer equipo con el personal de salud hasta lograr pertenencia y convicción.

La credencialización se realizó casa por casa, invitando a las familias a registrarse en los centros de salud y hospitales públicos, prometiendo atención sanitaria garantizada y gratuita. También encontró incredulidad y barreras que se han ido derribando con resultados: de acuerdo con el Inegi, Nuevo León es el estado con menor carencia, garantizando el acceso a la salud a 85% de su población.

Mientras en México el gasto de bolsillo de las familias aumentó 8%, en Nuevo León se redujo 12% en dos años: el porcentaje del ingreso que las familias destinaban a la atención de la salud pasó de 5.5% a 3.9 por ciento.

Además, la creación del Fideicomiso para las Enfermedades de Alto Costo y una estrategia de detección oportuna y de acompañamiento a los pacientes ha permitido lograr la cobertura universal para niñas, niños y adolescentes con cáncer, implementar un eficaz programa de atención en cáncer de mama e integrar progresivamente nuevas enfermedades, garantizado la continuidad de los tratamientos. Los resultados obtenidos hablan por sí mismos: la tasa de mortalidad en cáncer infantil pasó de 5.61 en 2022 a 3.07 en 2024 y la de cáncer de mama a 23.6, la más baja de los últimos diez años.

También se ha puesto foco en la salud materno-infantil: el impulso a la lactancia materna, la inauguración del Instituto de Salud Fetal, el programa OYE —oír y escuchar—, para niñas y niños con sordera al nacimiento, y el seguimiento estrecho a las mujeres embarazadas también ha dado frutos: la mortalidad materna se redujo significativamente pasando de 55.1 en 2021 a 19.6 en 2024.

El programa Código Infarto también ha logrado reducir la mortalidad en los servicios públicos estatales en 55%, incrementar la cobertura en los tratamientos de 6% en 2021 a 90%, mientras se triplicó el número de pacientes atendidos.

Alma Rosa reconoce que lo logrado hasta hoy es en gran parte gracias al trabajo colaborativo entre la Secretaría Estatal de Salud, el IMSS y la iniciativa privada, en la que resalta el apoyo de TecSalud, las universidades y la comunidad empresarial. Después de entrevistarla en el imperdible último episodio de Medicina con M de Mujer de este año, pienso que su estilo de liderazgo capaz de escuchar a todas las partes y lograr consensos, su profundo conocimiento de los indicadores de salud y enfermedad de su estado y la pasión que contagia en su equipo ha sido clave. Sin duda, la decisión del gobernador Samuel García con el nombramiento y apoyo a la doctora Marroquín frente a la Secretaría de Salud estatal, le permiten hoy presumir que vivir con salud es hoy una posibilidad real para los neoleoneses.

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