Así, en este drama

Pareciera increíble, pero uno de los equipos más caros, no tiene asegurado ni siquiera el comodín.

Además de los lideratos divisionales todavía en juego, los equipos con cierta inercia apuestan a este último suspiro donde aventarán todo su nivel en conjunto —o a fuerza de esfuerzos individuales— con tal de alcanzar uno de los boletos con los cuales puede “salvarse la temporada”, si así se le puede decir.

“Salvífico” porque es apenas algo descriptivo para un apenitas si así lo tuvieran los Metropolitanos de Nueva York, un equipo al cual le queda esa expectativa en el pasado del ‘no les duele nada’ y hoy los vemos sacando dos juegos el fin de semana como para medio sobrevivir de lo que era un tobogán bastante fangoso para colmo.

No es innecesariamente paradigmático el caso de los Cerveceros de Milwaukee, aunque sí está la cosa como para aprender y es parte de un equilibrio necesarísimo ya en las Grandes Ligas: el cierre podría ser mucho más emocionante si los equipos de abajo le metieran un poco de inversión desde el generoso Central Fund anual; es inexplicable observar como los mencionados Mets, junto a sus vecinos Yankees neoyorquinos o a los Dodgers de Los Ángeles y los del Top 10 de “gastalones” meter literal toneladas de dólares como para que unos Rayos de Tampa te puedan “rayar el carro” con una inversión tamaño envoltura de chicles.

Pueden ser la tragedia de la Liga Nacional y de la Americana los Gigantes de San Francisco y los Rangers de Texas, respectivamente, por supuesto, esa estampa es al momento pues no se sabe si a alguno más —sin enviar saludos hasta Boston— puede ocurrírsele un resbalón anticlimático.

Inevitable mencionar: se ha ido Robert Redford a los 89 años y The Natural es un infaltable material visual no sólo por basarse libremente en la historia de Eddie Watkus, quien regresara a los Phillies de Filadelfia después de un episodio peligrosísimo… Roy Hobbs con el “madero del rayo” y esa escena —sin spoilers— con la iluminación del estadio, es de insistir, nadie podrá olvidar ese gran momento del séptimo arte; por cierto, el rubio Redford (qepd) contaba ya con 47 “añitos” al momento del rodaje de dicha película.

Pero como en Súper Beis nos preocupamos por el fiel electorado, perdón, por el amplio grupo de lectores, nos dimos a la tarea de averiguar sobre un par de fantásticos filmes de pelota hoy totalmente desconocidos:

1. Long gone, de 1987, con Virginia Madsen, para algunos, ojo, el mejor filme de beisbol con tintes de Bull Durham, nada menos.

2. Bingo Long Travelling All Stars & Motor Kings ya con el nombre… tiene a Richard Pryor y habla de la época jolgoriosa de las Ligas Negras.

Ambas piezas difíciles de conseguir, se las platicaremos DM pronto, pues, vale mucho cada una de las mismas.