Layering: un must en los outfits invernales

Durante otoño e invierno las temperaturas bajan considerablemente, lo que nos obliga a cambiar la organización de nuestro armario y pasar de las prendas ligeras a cuellos de tortuga, abrigos y piezas fabricadas con los tejidos más calentitos. Aunque en tiempo de frío —verdaderamente— no siempre conviene usar una única prenda sino agregar varias, para ir sumando o restando según los cambios de clima. Esta técnica es conocida como layering.

El layering es una técnica de vestimenta que sirve para tener un mayor control de nuestra propia temperatura, algo ideal para el invierno, cuando los cambios de clima suelen ser impredecibles, y justo cuando los interiores suelen ser más calientes que los exteriores, donde las temperaturas son más extremas de lo normal.

Ahora que estás por sacar tus piezas de invierno de lo más profundo del clóset, revisa este texto y aprende a combinar varias prendas de ropa para adaptarte mejor al clima de la temporada otoño-invierno. Y, mientras lo haces, el layering te ayudará a crear un look con más profundidad y estilo.

Qué es el layering

El layering es una forma inteligente de vestir durante el invierno. Esta técnica también es conocida como "capa sobre capa" y consiste en combinar varias prendas de ropa, colocándolas en capas.

Además de lo oportuna que es para el control de temperatura en medio de los cambios de clima extremos, un look en capas permite jugar con diferentes texturas, colores y volúmenes. Algo que le encanta a quienes gustan de experimentar con sus outfits. Combinar una prenda ajustada con una suelta, o mezclar materiales como la lana, el cuero y el algodón ofrece mayores oportunidades creativas a la hora de crear looks únicos.

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Cómo crear layering en mis atuendos

Combinar la funcionalidad con la moda no es tan complejo, pero siempre se agradecen las recomendaciones para hacerlo de manera efectiva; aquí te decimos qué requieres para lograr un look en layering increíble:

Capa base: esta primera capa está compuesta por prendas cómodas y ajustadas al cuerpo; camisetas de algodón o suéteres de cuello alto son una buena elección.

Capa media: aquí entran los suéteres de lana, chalecos o sudaderas; gracias a esta pieza te mantienes caliente.

Capa externa: protege de las inclemencias del clima (lluvia, viento, nieve); abrigos y chaquetas acolchadas son la opción más popular.

Accesorios: aportan un toque adicional de estilo y ayudan a mantenerte abrigada; intenta con bufandas, gorros o guantes.

Recuerda que en esta temporada los colores neutros, como beige o gris, son los más populares. No olvides la importancia de aportar textura y, sobre todo de mantener la comodidad sin olvidar la armonía. ¿Listo para echar a andar un nuevo nivel de sofisticación?