¡Del papel al dato! Así avanza la receta electrónica en México

En México, siete de cada diez consultorios y hospitales todavía no utilizan tecnología para gestionar su información médica. A pesar de que el 30% ya cuenta con expediente clínico electrónico, la cifra revela una brecha profunda en la digitalización del sistema de salud.

“Mostraba un dato en la presentación que habla de que el 30% de los consultorios en México ya tienen un expediente clínico electrónico. No estoy convencido, pero es un dato oficial, yo me voy a ir con ese”, señaló Bruno Varela, director general de Medikit, empresa especializada en recetas electrónicas y soluciones tecnológicas en salud en Expo FAC Farmacias y Cuidado Personal.

Esa falta de conectividad entre hospitales, clínicas y consultorios impide que los médicos, farmacéuticos y autoridades puedan compartir información útil para tomar decisiones rápidas y basadas en evidencia.

Te podría interesar leer: Buscan certificar a 300 mil operadores de farmacias en México

“Hoy tenemos una salud muy desarticulada… todos necesitan tener un mismo idioma para comunicarse, y ese idioma es la receta electrónica”, añadió.

La receta electrónica como punto de partida

La receta electrónica no solo busca reemplazar al papel, sino convertirse en el eje de un sistema interconectado entre el IMSS, ISSSTE, INSABI, hospitales privados y farmacias.

Este tipo de herramientas permitiría que un paciente atendido en una institución pública pudiera surtir su medicamento en una farmacia privada, en caso de desabasto, sin repetir todo su proceso médico.

“Qué padre sería que una receta del IMSS, si por alguna razón no se tiene en la farmacia del IMSS, la puedan surtir en una privada que sí tuvo el medicamento”, explicó Varela. “Ahí ya no estamos hablando de tecnología, estamos hablando del sistema de salud”.

Este modelo facilitaría la trazabilidad del medicamento, evitaría errores en la prescripción y permitiría generar bases de datos en tiempo real sobre qué enfermedades se están tratando y cómo.

Datos que cambian la salud pública

Uno de los principales beneficios de la digitalización es la posibilidad de transformar los millones de recetas médicas y expedientes en información estratégica. Según Varela, contar con estos datos permitiría crear políticas públicas más precisas, mejorar el abasto de medicamentos y prevenir enfermedades en regiones específicas.

“Podemos empezar a entender de qué se está enfermando la población, cómo están usando los médicos los medicamentos y cómo empujar regulaciones o políticas públicas para prevenir los malos usos”, señaló.

El especialista subraya que esta información también ayudaría a definir programas de vacunación y estrategias de prevención por zonas geográficas.

“No es lo mismo hablar de las condiciones de salud en Sonora que en Veracruz, donde hay temporadas muy claras de dengue. Ese tipo de decisiones pueden ser enfocadas con base en la información.”

Inteligencia artificial con identidad mexicana

Sin datos locales, la inteligencia artificial médica no puede adaptarse a las necesidades del país.

“Los modelos europeos no tienen dengue”, ironiza Varela. “Queremos usar inteligencias artificiales basadas en esos modelos, pero no reflejan nuestra realidad. Necesitamos generar datos del comportamiento estadístico de nuestras poblaciones antes de aplicar IA.”

El objetivo es construir herramientas predictivas que ayuden a detectar brotes, anticipar epidemias o mejorar la atención hospitalaria. Pero todo comienza con un paso esencial: digitalizar la información médica.

El reto de la privacidad

Aunque la digitalización ofrece grandes beneficios, aún existen vacíos legales sobre cómo usar y proteger los datos de salud. En México solo se aplica la Ley de Protección de Datos Personales en Posesión de Particulares, que, según Varela, resulta insuficiente.

“Básicamente dice que puedes hacer cualquier cosa con los datos del paciente, siempre y cuando le avises al paciente. Eso no es proteger los datos”, advirtió. “Nos urge como país tener una regulación muy clara que permita intercambiar información de forma segura, porque eso en algún momento le va a salvar la vida a alguien.”

bgpa