Pulso de la democracia
El apoyo público a la democracia y las actitudes conducentes a contar con una democracia estable son menores hoy de lo que eran dos décadas atrás.
Recientemente fue presentado el Barómetro de las Américas 2023, denominado: pulso de la democracia. Este informe, preparado por LAPOP Lab de la Universidad de Vanderbilt, con el apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), captura las percepciones de las personas del hemisferio a través de la realización de encuestas y el análisis de la información recibida en 26 países en donde se llevaron a cabo 41 mil 524 entrevistas.
El informe coincide con la preocupante tendencia de otros estudios que alertan sobre el declive democrático y dan cuenta de la progresiva insatisfacción de la ciudadanía con el desempeño de los gobiernos de la región. Entre sus principales hallazgos destaca que el apoyo público a la democracia y las actitudes conducentes a contar con una democracia estable son menores hoy de lo que eran dos décadas atrás.
Por otra parte, según este informe, el apoyo a la democracia es mayor entre las personas más educadas, de más edad y con mayor poder adquisitivo y, desde 2016, tres de cinco personas adultas entrevistadas expresan apoyo a esta forma de gobierno.
Usando datos del índice de democracia del Instituto V-Dem de la Universidad de Gotemburgo y los datos del Barómetro de las Américas, es posible deducir que, en promedio, los países que están calificados como más democráticos tienen poblaciones que conscientemente respaldan más a la democracia como reflejo de una buena gestión pública.
Según los datos recabados, 33% de las personas entrevistadas creen que la mejor forma de generar cambios en sus países es votando. Sin embargo, 22% cree que es más efectivo participar en organizaciones locales, mientras que 18% ve poco probable que involucrarse en política pueda generar algún cambio.
Asimismo, cabe destacar que la confianza en los procesos electorales ha disminuido levemente a través de los años. En promedio, en América Latina y el Caribe, 44% de los individuos entrevistados en 2012 manifestaron confianza en las elecciones, en comparación con 38% en 2023.
El informe también señala que la confianza en las cortes judiciales y los poderes legislativos permanecen en bajos niveles. La confianza en el Poder Ejecutivo ha disminuido en los últimos años, mientras que la confianza en las fuerzas armadas y en la Iglesia se mantiene alta.
Según el informe, existen razones para ser optimistas sobre el porvenir de la democracia, en tanto los grupos de edad correspondientes a la juventud están más comprometidos con la democracia que generaciones anteriores, quizá por una mayor difusión pública de los beneficios prácticos de la democracia.
BALANCE
El Barómetro de las Américas 2023 nos recuerda una vez más que la democracia sigue bajo presión en varios países de la región. Para reavivar el interés y reforzar la acogida de la ciudadanía hacia la democracia es fundamental invertir en oportunidades que generen buena gobernanza y desarrollo económico inclusivo.
Restablecer la confianza en las instituciones democráticas es clave para recuperar el respaldo hacia la democracia. La calidad y sostenibilidad de la democracia recae en instituciones y procesos políticos fuertes que se manejen con integridad y transparencia.
Bien lo ha mencionado Luis Almagro, secretario general de la OEA, “la ciudadanía es la única garantía de que el Estado de derecho sea un Estado de derecho democrático, pero con ello no alcanza. La ciudadanía no se puede ejercer en plenitud en un contexto de pobreza y desigualdad. El acceso desigual a derechos implica un alejamiento de los ideales democráticos, y se transforma en caldo de cultivo del autoritarismo”.
*Los puntos de vista son a título personal.
No representan la posición de la OEA
