Se cumple un año del asesinato de Javier Valdez

CIUDAD DE MÉXICO.

Hoy 15 de Mayo de 2018 se cumplen 365 amaneceres sin ti, definitivamente el año más duro de mi vida.

Así, con su familia al frente rodeada de amigos y compañeros de trabajo, dio inicio la jornada de protesta por la muerte del periodista Javier Valdéz. Inauguraron una muestra gráfica que recopila un año de protestas en periódicos y revistas.

En un país donde la mayoría de la sociedad deja solos a nuestros periodistas, siempre hay personas valiosas dispuestas a recordarnos que esto ¡No ha acabado!”, dijo Tania Valdez, hija de Javier Valdez.

Un año en el que la familia del periodista no solamente descubrió el dolor, sino también la dura carga de ser victimas indirectas de la violencia, y como muchas de ellas tuvieron que cambiar sus hábitos, abandonar su hogar y establecer mecanismos se seguridad para tratar de mantenerse a salvo.

Conocimos además del dolor y todo lo que implica su ausencia, el miedo, el miedo porque ahora mis hijos temen lo que a mi me pueda pasar algo. Ya les quitaron a su papá y ahora temen por su madre, pero yo también temo por ellos. También nos preocupa la seguridad no nada más nuestra si no de los compañeros, colegas de Javier, del periódico, de la gente cercana a él”, señaló Griselda Triana, esposa de Javier Valdez.

A un año del asesinato, la seguridad perimetral en el semanario Ríodoce se mantiene, pero además se incrementaron las precauciones, tras la identificación de los tres presuntos asesinos materiales, la detención de uno de ellos y la sospecha de que la muerte la ordenó el grupo delictivo de los Dámaso López.

Pensamos que una vez que se da esa captura sí hay un nivel de riesgo que se aumenta, aun cuando sabemos que los informes señalan que la organización esta dispersa, muchos se fueron para otro lado o se replegaron los bandos, aun cuando tenemos informes de eso es peligroso. Hemos publicado el tema hasta donde ha sido posible, por supuesto, con mucho mayor cuidado, si esto es posible, y con niveles de autocensura más alto”, explicó Andrés Villarreal, jefe de información de Ríodoce.

A un año, su familia todavía se cuestiona qué pasó, pero también hay un reclamo al propio Javier, a su labor como periodista, a sus publicaciones que pusieron en riesgo a él, y a los suyos.

Él se tenía que haber ido, lo platicamos, yo le insistí, y al final de cuentas él decidió no irse porque pensó que no iba a pasar nada, de repente le decía que egoísta fuiste porque no pensaste en nosotros. Nuestra última llamada fue para un asunto muy doméstico, muy familiar, si había o no hecho comida porque él iba a llevar un pollo porque los lunes yo no hacía comida, una comida que ya no llego”, dijo Griselda Triana, esposa de Javier Valdez.

Aquí el reportaje completo:

cva