105 105 103

Quizá parezca un código o un mensaje encriptado el título de esta entrega, beisboleramente podemos decir que no es así. La pelota tiene 108 costuras, tampoco va por ahí; ni puede ser un código binario: hablamos del trío de pedradas con las que Ben Joyce dominó a ...

Quizá parezca un código o un mensaje encriptado el título de esta entrega, beisboleramente podemos decir que no es así. La pelota tiene 108 costuras, tampoco va por ahí; ni puede ser un código binario: hablamos del trío de pedradas con las que Ben Joyce dominó a Bobby Witt Jr. para el cerrojazo de unos Angelinos  sobre los talentosísimos Reales.

Joyce es un diestro tirafuego originario de Tennessee, quien en su segunda temporada en MLB ha ponchado a 26 feligreses en 29.1 entradas, solamente le han conectado 22 imparables.

Por su parte, el junior Witt “nada más” está bateando un cósmico .352 con impresionantes 177 imparables en 126 juegos al momento, siendo un pelotero clave para los Reales, además de que su padre, del mismo nombre, jugó 16 temporadas en el big show y, como dato anecdótico, como para establecer a una familia beisbolera, sus tres hermanas están casadas con exjugadores ligamayoristas.

Así, tuvimos un duelo de un lanzador de 22 años atizándole esa secuencia de velocidades —a) 105 mph, b) 105 mph, y c) 103 mph— a un bateador de 24 años que se veía casi como mono de alambre.

Ahora bien, cabe preguntarse si éste es un “nuevo beisbol”, donde tendemos a velocidades medidas para todos y cuando tendremos que acostumbrarnos a ver un festival de pedradas, pues hemos, reiteradamente, señalado en este espacio la tendencia a algo como “pan o palo” de alguna época de nuestra historia: trick or treat, vuelacercas o ponche, satisfacción inmediata (O NO) en pos de obtener el jugoso botín de reducir los tiempos de juego por debajo de las 2:00 horas…

Todo lo anterior y el clarísimo dilema, digamos, “biomecánico”, donde la historia nos ha mostrado cómo todos los velocistas —con furriagazos constantes de arriba de 100 mph hacia al plato— casi siempre terminan en el hule o con una carrera recortada; ahí sí que estaremos pendientes de si es durable o, al menos, constante este joven prodigio del fuego, Ben Joyce, como una de las pocas esperanzas de los, literal, alicaídos “serafines”.

REVELAN GRUPOS DEL CLÁSICO

Salió a la luz el formato para el Clásico Mundial de Beisbol del 2026 y a México le pusieron una trampa MORTAL en un grupo a jugarse en Houston (6-11 de marzo) ante un casi obvio rival como Estados Unidos, un peligroso “USA disfrazado” con Gran Bretaña, pero aún un “spaghetti letal” con Italia, nuestro coco, retacado de ítalo-estadunidenses en una onda Super Mario Bros, por aquello de juego nivel complicado.

Pinta necesarísima otra GRAN coordinación para armar un trabuco tricolor, sólo así contra esa jauría del Grupo B; el Grupo A, con Cuba y Puerto Rico; el C, con Corea y Japón, pintan cantados, y en el Grupo D sudarán feo Dominicana y Venezuela con Países Bajos y, quizá, con Israel…

Temas: