Logo de Excélsior                                                        
Trending

1945, de Hiroshima, Nagasaki y la natación mexicana

Cuando un grupo de nadadores mexicanos emprendió en 1945 un viaje a Akron, al campeonato de natación estadunidemse, muchas historias estaban por escribirse; una, el holocausto

Pedro Díaz G. | 06-08-2020
Portada del libro Cenizas de mi padre, Casa Juan Pablos, 2008.
Portada del libro Cenizas de mi padre, Casa Juan Pablos, 2008.

CIUDAD DE MÉXICO.

Es 1945. Este año quedará marcado en la memoria de la humanidad por el estallido atroz de un par de bombas. 

Pero eso el mundo apenas lo sabrá. En tanto, el deporte mexicano escribirá otro de sus capítulos de gloria, a la par de la catástrofe atómica. 

Mientras en el mundo se gesta el fin de la Segunda Guerra Mundial, en el Deportivo Chapultepec se realizan torneos de natación Oklahoma-México.

Alberto Isaac es la figura en los 100 metros libres y Ramón Bravo en los mil 500. Joaquín Capilla comienza a ofrecer sus espléndidos vuelos desde la fosa.

El deporte sigue internacionalizándose. La Unión Atlética Amateur de los Estados Unidos invita a la Federación Mexicana de Natación a participar por primera ocasión en su Campeonato Nacional. Las competencias son en Akron Ohio.

Lorenzo Sours, presidente honorario de la federación, sugiere que se consigan las marcas de los estadunidenses en las distintas pruebas; Federico Mariscal cumple con la misión de espionaje.

Y al estudiarlas y hacer la comparación con los tiempos de los competidores mexicanos, se concluye que puede hacerse un papel decoroso si va un grupo reducido y bien entrenado a ésta, que es considerada una prueba aún más difícil que la que se podría dar en Juegos Olímpicos.

La razón es sencilla: Estados Unidos tiene a los mejores clavadistas y nadadores del mundo, pero no puede llevarlos a todos a una Olimpiada. Su campeonato nacional resulta entonces un escaparate que rebosa atletas de primer nivel.

Y ya viajan los mexicanos rumbo a Akron. Son los hermanos Antonio y Diego Mariscal, Ramón Bravo y Alberto Isaac.

Los Mariscal participarán en clavados (Antonio es campeón nacional y centroamericano en trampolín de tres metros; Diego es novato en estas lides); Bravo es campeón nacional de fondo y competirá en 1500 metros; Isaac, monarca en los 100 metros libres.

Se aproxima el final de la guerra. México envía al Escuadrón 201. Sus 300 pilotos entran en acción el 7 de junio y bombardean posiciones japonesas en una región llamada Cagayán.

Circula el automóvil por carreteras estadunidenses cuando un hombre, el presidente de ese país, Harry S. Truman, da el 5 de agosto una orden de venganza que aterrará a la humanidad: la bomba atómica, la muerte. Las cictrices eternas.

Viaje que nunca olvidarán, los nadadores mexicanos:

El 11 de agosto arriban, después de un épico recorrido de diez días, únicamente para saber que las pruebas de Alberto Isaac serán al día siguiente. La Flecha de Colima clasifica; sus compañeros le secan y recuestan, pero él tiene un insoportable dolor de estómago. Compite, pasa a la semifinal. Se queja. Y guarda el mejor de sus esfuerzos para la última prueba.

Que se lee, en La Afición: "Isaac nadaba con ritmo estupendo; pero no sobresalía del grupo. Faltando como veinte metros para llegar a la meta comenzó a adelantarse, lenta pero seguramente, hasta llegar con un cuerpo de ventaja. Fue la alegría enorme. Los coaches de todos los equipos en competencia elogiaron al nadador mexicano, quien los dejó asombrados con su forma y enorme velocidad".

El colimense se convierte así, en campeón de natación de los Estados Unidos. Y su medalla de oro es más grande que un centenario. Y es la primera vez que un extranjero logra el triunfo en los 100 metros libres...

Sus compañeros, mientras tanto, obtienen discretos resultados. Lo mejor: entre 20 clavadistas de Estados Unidos y Canadá, Antonio Mariscal queda en el tercer sitio en plataforma y se hermano Diego es undécimo. En 1500 metros, por último, Ramón Bravo llega sexto sitio con tiempo de 22.58 minutos (su mejor marca es de 21.49).

El Michigan State College queda en primer sitio, al sumar 26 puntos y en el séptimo lugar, con cinco unidades, se registra un empate entre los competidores mexicanos y los de la Academia Naval de los Estados Unidos. El campeonato nacional de los Estados Unidos bate récord en número de participantes: 135.

Para los mexicanos, fue un viaje de diez días porque el automóvil de la travesía se desbieló, detuvieron a reparar y emprendieron, un día y medio después, el camino hasta Ohio. Fue el 5 de agosto. Explotaba la bomba en Hiroshima. Ellos sufrían sus propias desventuras en Texas.

El regreso fue caótico. Y el viaje de estos jóvenes quedó tan plasmado en su memoria que ha sido narrado, por Claudio Issac en el libro Cenizas de mi padre, 

Se publicó en Letras libres: 

Cenizas de mi padre trata de Alberto Isaac, pero no es una biografía novelada ni una semblanza. Contiene, sí, una novela en la que se narra el viaje que Alberto y cuatro nadadores mexicanos más realizaron en automóvil para participar en el Abierto de Natación y Clavados de Estados Unidos en Akron, Ohio, en agosto de 1945 (cuando los bombardeos de Hiroshima y Nagasaki).

Esta pequeña novela, casi un esbozo de road-novel, se encuentra contrapunteada por una serie de textos cortos –a caballo entre el diario, la crónica y las memorias– en los que Claudio Isaac trata de fijar la figura del padre encantador y a la vez ambivalente, como todos los padres, que fue para él Alberto Isaac.

* * *

¿Como cruzar gran parte de México y territorio estadunidense en un automóvil con cinco jóvenes en el que sólo uno de ellos sabe manejar? 

Simple. La juventud todo lo resuelve. Mientras el conductor duerme, uno de los otros, encarrerado el automóvil y metidas todas las velocidades, se dedicara a acelerar, frenar y mover el volante, pues eso del cluth sólo se le da a uno. 

El auto se les desbieló en el camino y llegar a las competencias fue una odisea digan de narrarse en un libro; pues al regreso, una vez estalladas las bombas atómicas, el mundo no sería el mismo, y la muestra inmediata fue la escasez de gasolina. 

 

 

 

Y sí, tan emotivas fueron las narraciones de esta aventura, que quedó plasmada en un libro: 

En Cenizas de mi padre los géneros se entrecruzan: el diario, el ensayo, la crónica y la memoria son complementados por la narrativa.

Una serie de meditaciones y recuerdos personales se entretejen con el relato de la pequeña aventura que viven cinco mexicanos atravesando Estados Unidos en auto durante los tiempos de la Segunda Guerra Mundial, recreación de un episodio verídico de la vida de Alberto Isaac.

Un libro que franquea la condescendencia y las convenciones sentimentales y aporta siempre -tanto en lo humano como en lo literario- giros inesperados a un asunto común a todos: el enigma de la identidad. Bryan T. Scoular, académico y traductor del departamento de literatura de la Universidad de Nueva York, resume su lectura así: "El hallazgo mayor de Claudio Isaac en este maravilloso libro de reflexiones sobre padres e hijos es su gran tono. Cenizas de mi padre es un texto conmovedor, penetrante y escrito bellamente".

* * *

 

Volvamos a 1945.

Agosto.

La tragedia de Hiroshima no ha sido suficiente. También Nagasaki, ordena Truman.

Termina el holocausto. Respira la humanidad.

Y llora, también, porque la guerra se ha llevado la vida de 36 millones de seres humanos.

Es 15 de agosto. Un día más tarde habrá que reparar un poco de lo perdido y por ello se reúne, en Roma, el Comité Olímpico Internacional.

Hay que decidir cuál va a ser a ciudad que organice los XIV Juegos Olímpicos. Preguntan a los representantes de los comités olímpicos nacionales si están en condiciones de enviar deportistas a la Olimpiada de 1948 y la respuesta inmediata es sí.

Y dicen los ingleses que, pese a la devastación sufrida durante la conflagración mundial, Londres puede ser anfitriona.

Se reanudan, también, los Juegos Centroamericanos. Serán en Barranquilla, del 8 al 28 de diciembre de 1946.

El fantasma se las armas se desvance, poco a poco.

* * * * *

1945.

Tras el fin de la guerra también se reúne el Comité Olímpico Mexicano.

Y se decide que sí, existe un equipo de deportistas capaces de competir con dignidad en los Juegos de Londres.

Ya se habla, en el ambiente del hipismo, de un caballo jalisciense, un alazán tostado, tuerto él, llamado Arete y que tan buenos resultados ha obtenido en concursos hípicos organizados en a zona occidental del país, montado por el teniente Salvador Villalobos.

Lo que sucedió más tarde lo escribió Arturo Xicoténcatl en estas páginas: 

Después de la Segunda Guerra Mundial y tras de que Europa salía de las cenizas y los escombros, se generó en los diversos campos humanos, con la paz, una atmósfera cargada de energía y superación.

En el estanque olímpico, las poderosas brazadas de jóvenes de 16 y 20 años de edad derrumban los récords mundiales. Era una visión festiva que impregnaba al espíritu de alegría y admiración. Murray Rose, Alan Somers, Hironoshin Furuhashi, George Breen, Don Schollander, Tsuyoshi Yamanaka, Dawn Fraser, Lorraine Crapp.

Al través de la radio, que monopolizaba las noticias, llegaba a los oídos la magia del esfuerzo, en una época en la que las cronologías del récord mundial se formaban con la aparición de las noticias en la radio, el cine y los periódicos.

La natación mexicana era empujada en esa inercia. El acapulqueño Clemente Mejía ocupa un cuarto final en los 100 m estilo de dorso en los JO de Londres 1948, en los cuales, por cierto, se le negó la participación a Japón.

El equipo de relevo 4×200 m, formado por Ramón Bravo, Ángel El Pato Maldonado, Apolonio Castillo y Alberto Isaac, La Flecha de Colima, campeón nacional de Estados Unidos en 1945 en Akrón en los 100 m nado libre, termina en el séptimo lugar olímpico.

Era una natación de alta clase

 

1945 fue el año inolvidable. 

Vino la catástrofe, pero la juventud también se comía al mundo llena de esperanza. 

 

 

 

 

 

Si das click en la siguiente imagen podrás acceder a noticias en tiempo real:

 

 

 

 

Te podría interesar: 

 

 

En el siguiente video:

 

Policías de EU detienen a afroamericano y resulta ser agente del FBI

Youtube Imagen
Icono Play youtube

 

 

 

 
Sé parte junto con nosotros del poder de la tecnología.  Youtube es soportado por los navegadores web más difundidos y en Excélsior TV/Multicast somos ya un millón de suscriptores. No te quedes fuera e infórmate de la manera más precisa y oportuna. 

 

Logo youtube de Excélsior TV
 
 
«pdg»
 
 

 

 

Te recomendamos

Tags

Comparte en Redes Sociales