Historias sobre poesía, libertad y amor: Martín Solares cierra trilogía
El escritor concluye la saga policiaca inspirada en la vida y las ideas de los fundadores del surrealismo

Explorar las tres palabras clave para los fundadores del surrealismo: la poesía, la libertad y el amor. Éste fue el principal objetivo que se propuso Martín Solares (1970) al escribir sus novelas Catorce colmillos (2018), Muerte en el jardín de la luna (2020) y Cómo vi a la Mujer Desnuda cuando entraba en el bosque (2024), con la que concluye su trilogía de historias fantásticas inspiradas en este movimiento.
En cada obra recreo lo que significaron estos conceptos para los surrealistas. La influencia de este movimiento no se quedó sólo en la imaginación plástica, sino que sigue presente. Ellos vaciaron las palabras del veneno tóxico impreso en la Primera Guerra Mundial, de la retórica que conducía a la muerte, e hicieron poemas, teatro, cine y hasta propaganda. Seguimos viviendo bajo esas ideas”, afirma el escritor en entrevista con Excélsior.
El narrador comenta que empezó a escribir la primera versión de la saga en Francia, donde vivió y estudió entre el 2000 y el 2008. “En esos ocho años me interesé mucho en el surrealismo. Vi todas las exposiciones y leí todos libros que se me aparecían. Sentí un fuerte impulso de escribir una novela que ocurriera en Francia, en la que hubiera un detective que se infiltrara en el movimiento surrealista.
Quería meterme en sus reuniones, aprender cómo hablaban, de qué discutían y cuáles eran las grandes pasiones que provocaron que los integrantes de este movimiento siguieran unidos, a pesar de sus diferencias”, agrega.
Sobre el protagonista de las tres historias, que suceden en el país galo en un lapso de tres semanas, en el mismo mes de 1927, el también cuentista y ensayista añade que se dio cuenta que en obras como No manden flores (2015) “había estado usando narradores que tenían la voz de un policía cuarentón, desencantado, lleno de amargura, desilusionado por la falta de justicia”.
Señala que “necesitaba una voz narrativa nueva, fresca e inocente. Alguien que se sorprendiera con las cosas que hacían los surrealistas, con sus ideas, y que disfrutara el mundo como si estuviera recién creado, como lo hicieron ellos”.
Así nació el detective Pierre Le Noir, quien, con 18 años, experimentó una evolución a lo largo de las tres novelas.
Él no perseguía a los culpables, sino que éstos lo perseguían a él, ya sea humanos o fantasmas. Luchó por la libertad, por su vida, aprendió a sobrevivir y se enamoró”, detalla Solares.
Dice que Le Noir también profundizó su conocimiento sobre los surrealistas. “Eran críticos y rijosos. Reclamaban abiertamente a los políticos y a los militares por la suerte de los jóvenes en la guerra. Seguido los llevaban a las comisarías de barrio de París.
La policía francesa tenía expedientes extensos de cada uno de ellos. Intenté acceder a esos documentos, pero no lo permiten, siguen clasificados. Entonces decidí inventarlos, documentando bien qué tipo de barbaridades cometieron”, confiesa.
El también editor admite que más que una trilogía, este proyecto es un tríptico. “Es decir, tres aventuras vividas por un mismo personaje. Escribí las tres novelas a carcajadas. Los personajes me levantaban en la madrugada para dictarme frases, párrafos o capítulos enteros. Me quedo con un remolino de historias tras conocer a fondo la vida de los surrealistas”.
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Solares está convencido de que el momento que vivieron los surrealistas hace 100 años se parece al que se está viviendo ahora en México. “Después de estos últimos dos sexenios, el país está dividido como no lo había estado nunca. Antes era un bloque. Ahora hay dos facciones que se odian a muerte, irreconciliables, porque el lenguaje está envenenado. Creo que a todos nos corresponde limpiar ese lenguaje y no permitir que la política vuelva a envenenar la vida cotidiana”, concluye.
Indica que, a la par de esta trilogía, cierra también un ciclo de su vida. “Me dedicaré a otras cosas. Estoy terminando de pulir dos ensayos sobre la geometría de la novela, un guion de cine y empecé una novela que ahora ocurre en el norte México”.
La trilogía es editada por Penguin Random House.
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