El Iron Man

• Cal Ripken Jr. superó una marca que había durado 56 años.

Cal Ripken Jr. vio el line up de los Orioles en el que aparecía como titular, como lo había hecho en los últimos 2 mil 632 juegos de su equipo. Media hora antes del encuentro ante Yankees, se acercó a su manager Ray Miller y le dijo: “Creo que es hora”, mientras que le pidió que lo borrara de la alineación, con lo que puso fin a una racha histórica.

Ripken Jr. jugó sin descanso durante más de 16 años. No hubo dolor que lo tumbara, jugó resfriado, con temperatura y en varias ocasiones con molestias físicas. Todo desde el 30 de mayo de 1982.

“Ahora sé lo que se siente tomarse un día libre”, bromeó sobre su decisión. “Quería que fuera una celebración y no un duelo”, dijo el pelotero aquel domingo 20 de septiembre de 1998.

Ripken Jr. tenía 21 años al iniciar la cadena de 2 mil 632 juegos y la terminó a los 37. En ese tiempo vio pasar a ocho diferentes managers de Orioles y rompió el récord de Lou Gehrig de 2 mil 130 juegos. 

Gehrig, conocido como El Caballo de Hierro, terminó su cadena de juegos con Yankees el 2 de mayo de 1939. Una hazaña que perduró 56 años.

El 7 de junio de 1993, dos años antes de romper el récord, un alarmado Ripken Jr. despertó al médico del equipo con una llamada telefónica. Su rodilla derecha lucía inflamada y estaba rígida como una tabla, luego de que un día antes su spike se atoró en el césped al momento que intentó poner orden durante una trifulca que se presentó en el duelo entre Orioles y Marineros.

Un esguince de primer grado ponía en duda su participación esa misma noche ante Atléticos. Minutos antes del encuentro hubo una última prueba que generó más dudas entre los médicos. Ripken Jr. pidió que se le vendara la rodilla y decidió jugar, ante el riesgo de una lesión más grave.

Ripken Jr. se embasó tres veces, anotó la primera carrera y tuvo cuatro asistencias en las paradas cortas en la victoria de Orioles 3-2 sobre Atléticos. Fue su juego 1,791 consecutivo.

 No era algo nuevo para Ripken Jr., quien había enfrentado lesiones en silencio. Soportó críticas, cuando el dos veces Jugador Más Valioso, se mantenía en el line up a pesar de algunas malas rachas, sin que sus críticos conocieran el origen.

El 6 de septiembre de 1995, luego que el juego ante Angelinos se hizo oficial, el pelotero de Orioles había superado al Caballo de Hierro con 2 mil 131 juegos. Un tributo de 20 minutos lo acompañó en su noche y decidió seguir en el encuentro. No paró hasta tres años después con 2,632 juegos.

Cal Ripken Jr. fue parte de los Orioles campeones de 1983, acudió cada año al Juego de Estrellas mientras duró su racha. Tuvo 3 mil 184 hits, empujó 1,695 carreras y bateó 431 jonrones. Su número 8 fue retirado e ingresó al Salón de la Fama en 2007.