Un niño triste
Vaya coincidencia: recientemente mencionamos aquí en Súper Beis cómo El Rey de los Deportes necesita ídolos… De repente, todo el mundo impresionado con el arsenal presentado por los Padres de San Diego para ir sobre quienes son su propio “imperio del mal” ...
Vaya coincidencia: recientemente mencionamos aquí en Súper Beis cómo El Rey de los Deportes necesita ídolos…
De repente, todo el mundo impresionado con el arsenal presentado por los Padres de San Diego para ir sobre quienes son su propio “imperio del mal” divisional, los Dodgers de los Ángeles.
Tener esa trifecta de latinos poderosos con Fernando Tatis Jr., Manny Machado, la adición de Juan Soto (aunque fuera para una ventana en el 2022) siempre suena fuerte, claro, al menos que sumes 23 entradas sin anotar carrera, aun con el enfadoso ritual de dizque “impresionar” del mismo Soto a la hora de pararse en la caja de bateo.
En otro chasquido de dedos, nos cae la noticia sobre la suspensión a Tatis Jr. por 80 juegos, mismos que abarcan esta temporada —incluso si llegan a playoffs— y parte del siguiente calendario.
Parece que la medida ejercida por las Grandes Ligas es en estricto apego a un protocolo y a una manera de acabar con las sustancias ilegales. Se vería como un acierto si no salieran los detalles para revisar.
Estamos hablando de un pelotero que firmó un contrato por 340 millones de dólares en 2021, el tercero más lucrativo en la historia y con una proyección para este año de siete millones, yéndose a 10 millones en 2023 y así sucesivamente para cerrar con… agárrense bien… 36 mdd cada año, del 2029 al 2034 inclusive.
Ese contrato existe y se conocen esos datos, lo que impresiona es cómo la organización californiana pasó por alto o tapó las extrañas circunstancias de “algunos accidentes” en motocicleta entre temporadas, sí, ¡cuando ya tenía firmado ese contrato multimegamillonario!
Esperen, faltan más detalles, cuando leemos en Morningstar la nota de cómo Big League Advance recibirá parte de esa millonada por haberle “prestado” dinero (no hay otra manera de decirlo) desde 2017 a este joven Tatis Jr., la verdad que la historia toma cada vez más cosas extrañas.
Amén de la “cargada” no muy fuerte en argumentos por parte de algunos expeloteros, como su propio padre, el Big Papi (a quien quizá no le convenga hablar al respecto) y el mismo Pedro Martínez, lo cierto es que no hemos visto al joven estelar pelotero jugar un solo encuentro esta temporada y eso lastima la imagen del beisbol.
Si se sabía de antes sobre esta sustancia y no se anunció de inmediato, esperemos que se transparente el caso. Una falla institucional de los frailes cuando a Tatis Jr. le perdonaron “accidentes”, lo que en su oportunidad los Yankees no trataron con esa vara al mismo Aaron Boone y a Alfredo Aceves, distintos criterios hacen grandes a las organizaciones.
Duele esta situación por el niño triste, quien se queda, ¿temporalmente?, sin un ídolo, no por el “niño”, quien seguiría cobrando una millonada.
