La niña que encontró un diamante tan peculiar que le nombraron 'Incomparable'

En una remota aldea de la República Democrática del Congo, vivía Amina (cuyo nombre real no fue revelado públicamente por seguridad), una niña de apenas diez años que pasaba sus días explorando los alrededores de su humilde hogar. Con su curiosidad innata, en 1984 se aventuraba en los lugares que otros evitaban, siempre en busca de algún tesoro que pudiera llevar a su familia. Un día, mientras deambulaba a las afueras de casa de su tío, su vida cambiaría para siempre.

Era un lugar desolado, lleno de escombros y desechos. La niña se había acostumbrado a buscar en aquellos escombros, esperando encontrar algo que pudiera vender en el mercado local. Aquella tarde, mientras removía una pila de piedras, basura y tierra, algo brilló bajo el sol tenue del atardecer. Se agachó rápidamente, escarbando con sus manos pequeñas y temblorosas. La piedra fue encontrada en una pila de escombros legítimamente recogidos a partir de depósitos de minas antiguas de la cercana mina de MIBA Diamond. 

Lo que sacó de la tierra no se parecía a nada que hubiera visto antes. Era una piedra grande, del tamaño de un puño, con un resplandor inusual. Al principio pensó que se trataba de un cristal común, pero al levantarla notó que era diferente. Su color era un marrón amarillento que reflejaba la luz de una manera fascinante. La niña sintió un escalofrío recorrer su espalda; algo dentro de ella le decía que aquella piedra no era común.

Con el corazón latiendo aceleradamente, llevó la piedra a su casa. Su madre, una mujer sabia que conocía las historias de la región, la observó con asombro. "Este es un diamante, hija mía", le dijo con voz temblorosa. Ninguna de las dos podía creer que algo tan valioso hubiera sido encontrado en una pila de escombros. Sabían que esa piedra podría cambiar sus vidas, pero también entendían los peligros que traía consigo.

La noticia del hallazgo no tardó en expandirse por la aldea y luego por toda la región. Pronto, llegaron expertos para examinar la piedra. Todos quedaron perplejos ante su tamaño y color. Era un diamante en bruto de 890 quilates, uno de los más grandes jamás encontrados. Sin embargo, lo que realmente sorprendió a los especialistas fue su color y forma, algo que nunca antes habían visto.

La piedra fue trasladada a la capital, donde un equipo de gemólogos internacionales se encargó de estudiarla. Determinaron que era única en su tipo, con un brillo y un tono que desafiaban las características tradicionales de los diamantes. La pequeña y su familia fueron trasladadas a la ciudad, donde se les ofreció protección mientras se realizaba el proceso de evaluación y venta de la gema.

El diamante fue cortado cuidadosamente para preservar su tamaño y forma. Después de haber sido comprado por la Corporación de Zale, la gema resultante pesaba 407.48 quilates, unos 81.5 gramos y, a diferencia de otros diamantes, tenía un corte asimétrico que realzaba su singularidad. Por su rareza y belleza, los expertos decidieron llamarla "Incomparable". Nadie había visto algo así antes, y la historia del hallazgo se convirtió en una leyenda.

La gema fue diseñada por un equipo dirigido por Marvin Samuels y se dio a conocer finalmente en noviembre de 1984, en Nueva York.

Recibieron una suma considerable por la venta del diamante. Con ese dinero, pudieron construir una nueva casa, asegurar su futuro y ayudar a su comunidad. La pequeña, sin embargo, nunca olvidó la sensación que tuvo al encontrar la piedra, la misma sensación que la llevó a creer que había algo especial en ella. Decidió dedicar su vida a la educación, ayudando a otros niños de su aldea a acceder a oportunidades que ella nunca tuvo.

Con el tiempo, la historia de la niña y el diamante Incomparable se difundió más allá de las fronteras del Congo, llegando a oídos de personas de todo el mundo. Se convirtió en un símbolo de esperanza y perseverancia, demostrando que incluso en los lugares más inesperados pueden encontrarse tesoros inimaginables.

El Incomparable fue exhibido en museos y subastado entre los coleccionistas más prestigiosos del mundo. Sin embargo, ella siempre lo consideró un recordatorio de la tierra que la vio crecer, un testimonio de las riquezas escondidas en las profundidades de su país y de las oportunidades que surgen cuando uno sigue su intuición.

Y así, el diamante Incomparable cambió la vida de  y de paso la de todos los que escucharon su historia. La niña que encontró un diamante en una pila de escombros se convirtió en una leyenda, inspirando a generaciones a seguir buscando lo extraordinario en medio de lo ordinario. Porque a veces, los tesoros más valiosos se encuentran donde menos lo esperamos.

La historia del diamante

Después de que la niña encontró el diamante "Incomparable", la historia de esta extraordinaria gema apenas comenzaba. El descubrimiento inició una travesía fascinante para el diamante, que lo llevaría a través del mundo, capturando la atención y el asombro de todos quienes lo contemplaban.

El viaje a la ciudad

Tras ser descubierto en la pequeña aldea, el diamante "Incomparable" fue rápidamente trasladado a la capital del Congo. Allí, un grupo de expertos gemólogos fue convocado para analizar la piedra. Cuando la examinaron, quedaron boquiabiertos. Nunca antes habían visto un diamante de tal tamaño y con un color marrón amarillento tan peculiar. A medida que las noticias del hallazgo se difundían, la emoción y el interés crecieron. Pronto, tanto compradores como coleccionistas de todo el mundo comenzaron a ofrecer sumas inimaginables por la gema.

El corte del diamante

El siguiente paso en el viaje del "Incomparable" fue decisivo: debía ser cortado. Este proceso era de suma importancia, ya que determinaría la forma final y el valor del diamante. Los mejores cortadores de diamantes del mundo se reunieron en Bélgica para llevar a cabo esta tarea. Después de meses de estudio y planificación, decidieron dividir la piedra en bruto de 890 quilates. El resultado fue una gema principal de 407.48 quilates, junto con otras más pequeñas.

Sin embargo, lo que hizo única a esta gema fue su corte asimétrico, algo poco común en los diamantes. Este corte no convencional realzaba su carácter y lo diferenciaba de cualquier otro diamante en el mundo. Por esta razón, la gema fue llamada "Incomparable", un nombre que reflejaba su rareza y singular belleza.

La subasta y el nuevo dueño

Después de ser cortado, el "Incomparable" fue puesto en subasta en una de las casas más prestigiosas del mundo. Coleccionistas y multimillonarios de diferentes rincones del planeta se dieron cita para pujar por esta joya única. La subasta fue un evento de gran interés mediático, y el precio del diamante se disparó rápidamente. Finalmente, fue adquirido por un magnate anónimo que pagó una cifra astronómica por la gema.

El destino de la gema

El nuevo dueño del "Incomparable" decidió exhibir la gema en eventos exclusivos y museos alrededor del mundo. En cada lugar que visitaba, el diamante atraía multitudes. Las personas quedaban asombradas ante su tamaño, su corte asimétrico y su color único. Pero más allá de su belleza, la historia de cómo una niña de una pequeña aldea del Congo había encontrado este tesoro en una pila de escombros se convirtió en parte del atractivo de la gema.

A medida que el "Incomparable" continuaba su viaje por el mundo, la historia seguía siendo un recordatorio de las increíbles posibilidades que pueden surgir en los lugares más inesperados. En su aldea natal, la vida de una pequeña y su familia mejoró significativamente gracias a la venta del diamante. Con los fondos obtenidos, Amina ayudó a construir una escuela y a desarrollar programas educativos para los niños de su comunidad, asegurándose de que tuvieran acceso a las oportunidades que ella nunca tuvo.

El misterio del futuro

Aunque el "Incomparable" cambió de manos varias veces a lo largo de los años, siempre mantuvo su mística y su estatus como uno de los diamantes más extraordinarios jamás encontrados. Su valor aumentó con el tiempo, y algunos comenzaron a especular sobre su destino final. ¿Sería guardado en una colección privada, lejos de los ojos del público, o seguiría su viaje por el mundo, deslumbrando a todos los que tuvieran la suerte de verlo?

El diamante "Incomparable" es un símbolo de riqueza y belleza, pero también de esperanza. Representa la idea de que, incluso en las circunstancias más difíciles, pueden encontrarse tesoros que cambian vidas. La historia de la niñay el diamante sigue siendo contada, inspirando a generaciones a buscar lo extraordinario en lo cotidiano.

Así, el "Incomparable" continúa siendo más que una gema preciosa; es un recordatorio de las maravillas que el mundo aún guarda y de cómo una simple niña pudo descubrir lo que muchos otros habían pasado por alto. Su historia y su legado siguen vivos, tanto en los anales de la historia como en los corazones de aquellos que creen en la magia de lo inesperado.

¿Quién es el actual dueño de Incomparable?

El diamante "Incomparable" fue vendido en 2013 a Mouawad, una empresa familiar suiza de lujo especializada en joyería y relojes. Mouawad ha sido propietaria del diamante desde entonces y lo ha montado en un collar llamado "L'Incomparable Diamond Necklace", que se presentó como el collar más caro del mundo en ese momento, valorado en aproximadamente 55 millones de dólares.

El diamante sigue siendo parte de la colección de Mouawad, aunque no se ha informado de nuevas ventas o cambios de propiedad desde esa compra.

Los diamantes más grandes del mundo. 

1. Cullinan

• Peso: 3,106 quilates
• Ubicación del descubrimiento: Sudáfrica, 1905
• Detalles: El Cullinan es el diamante más grande jamás encontrado. Fue descubierto en la mina Premier de Sudáfrica y pesaba 3,106 quilates en bruto. Este diamante fue cortado en varias gemas, las más famosas son el Cullinan I (530.2 quilates) y el Cullinan II (317.4 quilates), ambas partes de las joyas de la Corona Británica. El Cullinan I es conocido como la Gran Estrella de África y está montado en el cetro real, mientras que el Cullinan II, o Segunda Estrella de África, está incrustado en la Corona del Estado Imperial.

2. Nuevo descubrimiento en Botsuana (2024)

• Peso: 2,492 quilates
• Ubicación del descubrimiento: Mina de Karowe, Botsuana, 2024
• Detalles: Este diamante, hallado por la compañía Lucara Diamond Corp., se ha convertido en el segundo más grande jamás encontrado. Con 2,492 quilates, esta gema en bruto es notable tanto por su tamaño como por su calidad. El diamante fue descubierto utilizando tecnología avanzada de rayos X, lo que permitió su extracción sin daños. Su valor estimado inicial es de aproximadamente 40 millones de dólares, aunque podría aumentar debido al interés de coleccionistas y joyeros de lujo​.

3. Sewelo

• Peso: 1,758 quilates
• Ubicación del descubrimiento: Mina de Karowe, Botsuana, 2019
• Detalles: Este diamante en bruto, cuyo nombre significa "Rara hallazgo" en setsuana, fue el segundo diamante más grande encontrado en Botsuana antes del reciente descubrimiento de 2024. Aunque Sewelo no es de calidad gemológica alta, su tamaño lo convierte en una pieza extraordinaria. Fue adquirido por la firma francesa Louis Vuitton para posibles usos en joyería.

4. Lesedi La Rona

• Peso: 1,109 quilates
• Ubicación del descubrimiento: Mina de Karowe, Botsuana, 2015
• Detalles: El Lesedi La Rona, cuyo nombre significa "Nuestra Luz" en setsuana, es el diamante en bruto más grande descubierto en más de un siglo antes del Sewelo. Se vendió por 53 millones de dólares en 2017. Su tamaño y calidad lo hicieron destacar en la industria del diamante, y fue adquirido por Graff Diamonds, que lo cortó en varias piedras de alta calidad.

5. Excelsior

• Peso: 995.2 quilates
• Ubicación del descubrimiento: Sudáfrica, 1893
• Detalles: El Excelsior fue el diamante más grande conocido antes del hallazgo del Cullinan. Fue cortado en varias gemas, siendo las más grandes el Excelsior I (69.68 quilates) y el Excelsior II (47.03 quilates). Aunque no es tan famoso como el Cullinan, sigue siendo uno de los diamantes históricos más importantes.

6. Star of Sierra Leone

Peso: 968.9 quilates

• Ubicación del descubrimiento: Sierra Leona, 1972
• Detalles: El Star of Sierra Leone es uno de los diamantes más puros jamás descubiertos. Fue cortado en 17 gemas, siendo la mayor de ellas de 143.2 quilates. Su calidad y pureza lo hacen destacar, y varias de las gemas resultantes se encuentran en colecciones privadas.

7. Incomparable

• Peso: 890 quilates
• Ubicación del descubrimiento: República Democrática del Congo, década de 1980
• Detalles: Este diamante de color marrón amarillento fue encontrado por una niña en una pila de escombros en la República Democrática del Congo. Tras ser cortado, resultó en una gema de 407.48 quilates con un corte asimétrico único. Fue vendido en 2013 y montado en un collar conocido como "L'Incomparable Diamond Necklace", uno de los collares más caros del mundo.

--