Alerta de Violencia de Género, mal evaluada

El seguimiento se puede hacer de forma puntual con base en los números del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública que se fueron obteniendo y sistematizando de las carpetas de investigación realizadas en cada municipio de toda la República. Si bien es cierto que hay delitos que no se denuncian, en el caso de homicidios dolosos y feminicidios sí hay un levantamiento de datos puntuales: De 2015 a 2018, hubo 9,857 homicidios dolosos contra mujeres y 2,602, feminicidios, es decir, asesinatos contra mujeres por razón de género. La diferenciación se hace con base en los informes que entregan las fiscalías o procuradurías estatales y éstas trabajan conforme la tipificación de ese delito (hay diferencias en cada entidad).

Los datos también pueden identificarse por estado, por lo tanto, se puede ver claramente cada uno de los lugares en donde se ha declarado la Alerta de Violencia de Género, la diferencia entre homicidios dolosos contra mujeres y los feminicidios, pero, el dato más interesante, quizás, es comparar los datos de homicidios dolosos de hombres contra mujeres ¿por qué? Porque lo que vamos a descubrir es que en la medida que se incrementan los homicidios dolosos contra hombres, también sucede contra mujeres, es decir, para lograr disminuir los homicidios contra las mujeres, se requiere disminuir la violencia en general.

Ahora bien, si revisamos los datos puntuales de homicidios dolosos contra feminicidios, en algunas entidades, a primera vista, podríamos pensar que, efectivamente, los homicidios contra el sector femenino son por razón de género, pero, cuando nos vamos a la búsqueda de los indicadores para calificar cuando un homicidio doloso es tipificado como feminicidio, nos vamos a encontrar grandes diferencias conforme a la norma de cada entidad.

Por ejemplo, en el 2018, Sinaloa reportó cero homicidios dolosos, pero, tuvo 49 feminicidios, igual Nuevo León, que hasta diciembre de 2018 cerró con 14 homicidios dolosos y 79 feminicidios. A diferencia de las otros estados con declaratorias que reportan más homicidios dolosos que feminicidios, pero retomando estos dos estados, vamos a ver lo siguiente: Nuevo León comenzó declarando en el 2015 un solo feminicidio, 2016: 3; 2017, 43, y 2018, 79. En estos cuatro años, la tipificación del delito se endureció y esa podría ser una explicación del incremento, pero no, porque si revisamos el caso de Sinaloa, tenemos lo siguiente: 2015, 14; 2016, 45; 2017, 84 y, 2018, 49. Es decir, algo está haciendo diferente Sinaloa que Nuevo León porque ahí sí disminuyeron los feminicidios. Así podríamos revisar cada uno de los estados que tienen declaratoria de Alerta de Violencia de Género y vamos a encontrar en dónde han dado resultado positivo las acciones que contemplan las declaratorias, pero no se puede generalizar que en ningún lado ha sido eficaz. Incluso, Chiapas, Michoacán, Morelos y Sinaloa cerraron 2018 con menos feminicidios que en el 2017. En principio, podemos decir que las declaratorias de Alerta de Violencia de Género funcionan porque obligan a que los gobiernos estatales realicen una estrategia extraordinaria para enfrentar la violencia contra las mujeres, pero los esfuerzos no siempre se ven reflejados cuando no se disminuye la violencia en general contra hombres y mujeres.

Finalmente, no quiero dejar de expresar que, lamentablemente, la disminución de recursos en el presupuesto del 2019 para atender la violencia contra las mujeres sí va a impactar negativamente en los avances que significó el trabajo de las declaratorias. Eso es doblemente lamentable si consideramos que frente a la Secretaría de Gobernación (que es de donde emana esta política), se encuentra una mujer que siempre ha sido aliada de la lucha del sector femenino.

Maestra en derecho constitucional por la UNAM

ruthzavaletas@hotmail.com