En su futuro
Como agua se nos escaparon las 18 semanas de la temporada regular de la NFL. Tras finalizar el último domingo de la campaña quedaron listos los playoffs, con 14 franquicias que mantienen sus esperanzas de quedarse con el trofeo Vince Lombardi. A partir del sábado ...
Como agua se nos escaparon las 18 semanas de la temporada regular de la NFL. Tras finalizar el último domingo de la campaña quedaron listos los playoffs, con 14 franquicias que mantienen sus esperanzas de quedarse con el trofeo Vince Lombardi. A partir del sábado arranca la postemporada, con los dos primeros juegos de un fin de semana de comodines que pinta para ser espectacular.
Como ya es una costumbre en esa fantástica liga, la paridad se hizo presente, el nivel de competencia es altísimo, y conseguir calificar no es cosa sencilla, razón por la que elegir a un favorito al título tampoco es fácil, claro que existen candidatos a disputar el Súper Tazón, pero eso no significa que existe una apuesta segura, en la NFL nada lo es.
Pero sí hay dos equipos que veo con mayores posibilidades de enfrentarse el 12 de febrero en el partido que nos dará al nuevo campeón: los Bills, que buscan regresar al gran juego por primera ocasión desde enero de 1994, y por otro, a los 49ers, que quieren su sexto campeonato.
A Buffalo lo elegí mi favorito al campeonato desde antes de que iniciara la temporada. El equipo dirigido por Sean McDermott tiene todo lo necesario, con un ataque prolífico, encabezado por Josh Allen, sin duda uno de los mejores quarterbacks; además tiene excelentes receptores, principalmente Stefon Diggs; una línea ofensiva muy confiable, y un juego terrestre que conforme avanzó el año se fue haciendo más confiable. Al ataque hay que agregar una de las mejores defensivas, que a pesar de quedarse sin Von Miller, se ubicó entre las principales. Ya estuvieron cerca recientemente, y parece que esta es la ocasión para darle a su gran afición el tan anhelado triunfo.
San Francisco fue de menos a más, ganando sus último 10 partidos, logrando la racha con dos mariscales de campo diferentes, incluyendo al novato Brock Purdie, que pasó de ser el último jugador seleccionado en el más reciente Draft, a titular. A la estabilidad que el joven le ha dado a la ofensiva, hay que sumar la llegada de Christian McCaffrey, que aportó una nueva dimensión al ataque; también cuenta con tremendas armas en el juego aéreo, y que ha recuperado a tiempo para la postemporada a Deebo Samuel, letal tanto por tierra como por aire. Los 49ers cuentan con una defensa dominante, por mucho la mejor de la liga, con estrellas, encabezada por el candidato principal a Defensivo del Año, Nick Bosa.
Ambos encontrarán duros obstáculos, tendrán que ganar tres partidos para jugar el Super Tazón, y existe una enorme posibilidad de chocar con los equipos que mejor marca tuvieron en cada Conferencia, pero la profundidad de su roster, la experiencia, el trabajo del staff de coaches, y el gran talento a su disposición, me hace pensar que en su futuro está enfrentarse en el juego más importante de los deportes profesionales en Estados Unidos.
