Éste es el big show

Queridos amigos lectores, ¡felices vacaciones!

Debemos platicar de un tema que, la verdad anda dando comezón, justo cuando había demasiada expectativa para tener un beisbol de altísimo nivel al comenzar la temporada y sí, la verdad ya empezamos a presenciar los espectaculares lances y las infaltables jugadas polémicas. Pero, es inevitable mencionar lo que varios de ustedes nos comentan en cuanto a la percepción de algunos juegos como “sosos” y la notoriedad, en plena semana inaugural, de butacas vacías.

Partiendo de lo esencial: efectivamente, no se percibe que el ritmo de juego esté cambiando demasiado, si las medidas deban aumentarse, porque eso sí, las jugadas en revisión —¡ah cómo quitan tiempo!— deberían ser ya en automático. Parece que todo ese tema de los minutos y segundos debería pasar forzosamente por la potestad de los umpires: esos personajes de uniforme oscuro la verdad deberían ser mucho más coercitivos a la hora de la acomodada de guanteletas, de quitarse la tierrita de los spikes, de colocarse la gorra o el casco, en fin, todas esas manías las cuales se suman y hacen otro aspecto de delación del juego.

No es casualidad esa dura onda de cuestionamientos —cada vez más comunes— hacia el Comisionado Rob Manfred en cuanto a los cambios y su afectación a la esencia del juego, como dijera la canción ¿Y todo para qué? si sentimos que OK, son Las Mayores, hay jugadas que te quedas con la boca abierta por la gran plasticidad y el impresionante nivel atlético-mental, para que, despuesito viene un relevista y perdemos un tiempal para que volvamos a la “acción efectiva”.

¿Saben por qué es preocupante esto?

Porque algunos de ustedes han comentado que sienten que el beisbol “se nos va”, a lo que alguna vez tuvimos con esas Series Mundiales de epopeya y los ídolos del pasado. Vaya, tampoco es para tanto, aunque el tema original de este Súper Beis nos tenía de plano en la delgada línea roja de otra polémica de esas que parecen no terminar. Se están dando más casos este naciente calendario de peloteros de posición lanzando en relevos, con juegos ya más que perdidos (aunque digan eso de “esto no se acaba, hasta…”

C’mon, una cosa es que sea divertido ver a un jardinero tirar a 52 mph y otra cosa es que los suscriptores de MLB TV Premium pagan unos $2,600 pesitos anuales para ver el “máximo nivel del beisbol”. Es una situación donde nadie gana ni siquiera a mediano plazo; abaratas el producto visual, si bateas un HR te ves “atascado”, si ves pasar cuatro “globitos” te pueden decir indolente.  Disculpen, se ve pésimo que los managers estén “implementando” para estas imágenes casi de circo o, de juego de cómicos vs. luchadores...  Se queda la pregunta: ¿urge el nocaut (mercy rule por más de 10 de ventaja) en las Grandes Ligas? ¡Pum!