El día que Benjamín Galindo venció al mejor atajapenales

En la final de la Copa América de 1993, el ‘Maestro’ enfrentó desde los once pasos a un guardameta con fama de ser un gran atajador

El festejo de Galindo después de anotar en la final de la Copa América 1993. (Mexsport)
El festejo de Galindo después de anotar en la final de la Copa América 1993. (Mexsport)

CIUDAD DE MÉXICO

Sin duda alguna, la derrota en la final de la Copa América de Ecuador 1993, es uno de los capítulos más dolorosos en la historia de la selección mexicana. Aquella selección dirigida por Miguel Mejía Barón perdió 2-1 ante Argentina el partido que definía al campeón de la competencia.

Entre otras incidencias, dicho cotejo celebrado el 4 de julio de 1993 en el estadio Isidro Romero de Guayaquil, está fresco en la memoria de los aficionados al futbol, por la solvencia técnica que mostró Benjamín Galindo cuando en el minuto 67 del partido, ejecutó el tiro penal que representaba el empate parcial 1-1 entre la albiceleste y el Tricolor.

En la jugada previa, Galindo había filtrado pase a Luis Roberto Alves, que apareció solo en el área e intentó eludir la salida de Goycochea que terminó derribando a ‘Zague’ y el árbitro brasileño Marcio Rezende no dudó en señalar la pena máxima.

Alberto García Aspe era el cobrador oficial de penales de aquella selección, sin embargo. fue Benjamín Galindo quien tomó el esférico para hacerse cargo de ejecutar a petición del propio ‘Beto’.

El cobrador era García Aspe, se acercó a mí para preguntarme si podía cobrarlo y yo le dije que sí, que no había ningún problema”, recordó el ‘Maestro’ varios años después.

La encomienda no era fácil para Galindo, tenía enfrente al guardameta argentino Sergio Goycochea que se había hecho famoso en el Mundial de Italia 1990 por ser decisivo en las series de penales y había sido clave en el pase del equipo que dirigía Carlos Salvador Bilardo a la final de aquel torneo.

En cuartos de final ante Yugoslavia, el guardameta argentino atajó los disparos de Brnovic y Hadzibegic, mientras que en la semifinal contra el local Italia detuvo los cobros de Roberto Donadoni y Aldo Serena.

Galindo colocó el esférico, se perfiló para tirar como zurdo, tomó impulso de diez pasos y comenzó su carrera al encuentro del balón, levantando la cara para percatarse de que ‘Goyco’ se inclinaba hacia la izquierda y entonces, el zacatecano tocó suavemente con el botín izquierdo hacia el lado derecho del guardameta que ya estaba vencido.

A pesar de que la selección mexicana perdió aquella final contra Argentina (2-1), Benjamín Galindo tuvo tiempo de exhibir su excelente técnica de golpeo y gran solvencia mental al momento de ejecutar desde el manchón penal.

cmb

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