Especulaciones y rumores en la invasión rusa
Especulaciones van y rumores vienen sobre lo que podría declarar el presidente Vladimir Putin durante el desfile militar del 9 de mayo en la Plaza Roja de Moscú, al conmemorarse el 77 aniversario de la capitulación nazi en la Segunda Guerra Mundial, y no es para ...
Especulaciones van y rumores vienen sobre lo que podría declarar el presidente Vladimir Putin durante el desfile militar del 9 de mayo en la Plaza Roja de Moscú, al conmemorarse el 77 aniversario de la capitulación nazi en la Segunda Guerra Mundial, y no es para menos, pues en estos momentos se está llevando a cabo la segunda fase de la “operación especial” rusa en territorio ucraniano. Algunos, especulan que el mandatario ruso estaría haciendo un llamado a una movilización militar masiva o una declaración de guerra oficial a su país vecino. Otros rumoran que sólo se daría un discurso victorioso sobre los territorios que han sido “liberados” de los nazis ucranianos: el Donbás, Mariúpol, Melitópol, Izium, Jersón, y algunas otras zonas del sureste ucraniano. También se habla constantemente que el líder ruso podría tomar la decisión de realizar referéndums en las zonas que están totalmente acordonadas y bajo el dominio ruso, particularmente en el este o sureste del país. Sobre esto último, las autoridades rusas han declarado que se pretende formalizar el uso del rublo como moneda oficial y hacer todo lo posible para que dichas regiones sean “lo más rusas posibles”.
De igual manera, dentro de las especulaciones que hay sobre este tema, el mismo papa Francisco declaró en una entrevista para el diario italiano Corriere della Sera que durante una visita a Budapest en abril, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, le habría asegurado que la guerra en Ucrania culminaría el día 9 de mayo.
A mi parecer, al presidente Putin le quedan muy pocas cartas por jugar, pero todavía tiene margen de maniobra en el sureste, este ucraniano y Transnistria, Moldavia, para continuar la guerra. Al hablar sobre una movilización masiva o declararle oficialmente la guerra a Ucrania, se tendrían que movilizar a reservas y conscriptos en toda la Federación de Rusia. Dicho proceso tardaría meses, no sólo en el reclutamiento, sino también en la parte del entrenamiento militar. También, toda la maniobra costaría miles de millones de dólares y llevaría tiempo para poder desplegarla por completo.
Rusia no ha aprendido de sus errores al haber querido tomar la capital y el norte del país en las primeras tres semanas de guerra. Al estar siguiendo día con día este conflicto, uno se puede dar cuenta que las tropas rusas siguen teniendo los mismos problemas que han surgido desde un principio: el espacio aéreo ucraniano no es controlado por Rusia en su totalidad, existen problemas de logística militar y de estrategia al avanzar en los pequeños pueblos que son capturados.
Ante la frustración, se incrementa el bombardeo en el país vecino y surgen amenazas que huelen a desesperación con los malos resultados expuestos.
Van más de 70 días de guerra, y Rusia ya cuenta con diez generales muertos en batalla y más de 20 mil soldados fallecidos. Tampoco ha habido un gran avance en los últimos días.
Por otra parte, se especula bastante sobre la salud del líder ruso, su posible mal de Párkinson y la posible operación quirúrgica contra el cáncer que se estaría practicando próximamente. La información proviene directamente de fuentes internas del Kremlin, pero no hay ninguna confirmación por el momento.
Los rumores seguirán creciendo mientras se acerque el 9 de mayo, pero dudo que esta fecha cambie algo importante en el curso de la guerra. El presidente Putin no puede para su invasión, pues entiende perfectamente que sería el principio de su derrocamiento en El Kremlin.
