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DF, ejemplo en lucha antitrata

Opinión del experto nacional

Opinión del experto nacional

Rosi Orozco*

El rescate de Matilde fue extraordinario. Un equipo de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) se trasladó a Tlaxcala para detener a Noé Quetzal, uno de los peores tratantes de personas buscados por el FBI. Un hombre al que otros tratantes admiraban y llamaban con cariño El osito Méndez. Al conversar con victimarios, quienes ya cumplen sentencia en la cárcel, comentan la gran admiración y temor que la gente de Tlaxcala sentía por este sujeto. Presumía de tener 150 víctimas y haber matado a muchas de ellas. Líder de una red internacional de trata que llega hasta Atlanta, Estados Unidos; por muchos años, logró comprar su impunidad. Pese a tener orden de aprehensión por homicidio, Noé Quetzal transitaba tranquilamente por las calles de Tenancingo. Una corrupción millonaria es lo que le había permitido a Noé Quetzal preservar su libertad.

Cuando la PGJDF fue a detenerlo, encontraron a Matilde con él. Una carta firmada supuestamente por Matilde solicitaba su rescate, razón por la que la PGJDF fue a buscarla. La sobreviviente explicó que dos años antes Noé Quetzal había sido aprehendido en un operativo de la Procuraduría General de la República (PGR), pero fue liberado a cambio de un millón de pesos. Un millón de pesos que recuperó con la explotación sexual de Matilde en Sullivan. En esta ocasión, afortunadamente, todo fue distinto.

Noé Quetzal inició su oferta al Ministerio Público en 100 mil pesos a cambio de su libertad y de Matilde. Él se negó. En el trayecto de Tlaxcala a la Ciudad de México la cantidad fue en aumento. La gente de la PGJDF no cedió. Al llegar a la capital, Noé Quetzal había ofrecido cinco millones a todo el equipo, comentó Matilde agradecida. Ocurrió algo maravilloso y clave en el proceso de restauración de la víctima: el MP rechazaba las ofertas de Noé Quetzal diciéndole que un ser humano era más valioso que cualquier cantidad de dinero, que no podía tratar a Matilde como mercancía, que ella era única e invaluable. Al escuchar esto, Matilde comprendió que no pasaría lo mismo que dos años atrás y tuvo por fin la esperanza de estar a salvo.

Con Rodolfo Ríos Garza dirigiendo la PGJDF  y con Edmundo Garrido como jefe inmediato, la fiscal antitrata Juana Camila Bautista y su equipo han podido hacer un trabajo que destaca por su efectividad y su integridad. Han logrado 51 sentencias: 39 con el Código Penal y 12 con la Ley General. Han colocado así al Distrito Federal como la entidad con más sentencias y la han distinguido como un ejemplo en la lucha contra la trata de personas.

En el caso de Noé Quetzal, la PGJDF, a través de la Fiscalía Especializada en Trata de Personas, ha hecho un trabajo sobresaliente, pues han dado con el paradero de cuatro víctimas más y se han trasladado a otros estados para rescatarlas y lograr las sentencias contra este criminal. También ha aprehendido a varios miembros de su red quienes operaban con Alejandra Gil en Sullivan.

Matilde jugó un papel vital en la localización y rescate de otras víctimas, pues su testimonio arrojó datos que permitieron identificarlas y encontrarlas. En la averiguación, las autoridades se enteraron de que había una niña de 11 años, hija de otra víctima. Se trasladaron nuevamente a Tlaxcala para rescatarla. Tiempo después, lograron dar con el paradero de la madre. Hoy, juntas por fin, han sido reintegradas a la sociedad exitosamente.

Poco después se rescató a una víctima originaria del estado de Oaxaca. La joven fue secuestrada en su lugar de origen y llevada a Tlaxcala para ser explotada sexualmente. Con gran valor escapó, pero sus victimarios, en venganza, asesinaron a su padre.  Al mismo tiempo, se rescató a una víctima del primo de Noé Quetzal, quien también ya ha sido detenido por la PGJDF. Las autoridades también están informadas del asesinato de otra chica en Tlaxcala. Las historias de estas jóvenes evidencian la crueldad con la que operaba Noé Quetzal, quien ya ni siquiera enganchaba a las chicas, sino que usaba la violencia de manera directa, las secuestraba y torturaba para someterlas. 

En casos como éste, donde hablamos de una red internacional de trata, trabajar codo a codo con otros países es vital. La PGJDF ha colaborado con el gobierno de Estados Unidos y juntos han conseguido encontrar a las víctimas y garantizar su seguridad, así como dar con los criminales y procesarlos. Las autoridades y organizaciones civiles estadunidenses que han colaborado con la PGJDF para combatir la trata de personas se expresan con respeto y reconocen el buen trabajo que ha realizado esta fiscalía especializada. Desde la sociedad civil aplaudimos a todos los héroes y heroínas de la PGJDF que luchan sin descanso para terminar con la esclavitud. 

Hoy, Noé Quetzal Méndez Guzmán se encuentra en el Diamante. Matilde está fuera de México, se le otorgó una visa humanitaria y se encuentra fuera de peligro con toda su familia. Rehace su vida al igual que las otras víctimas de este tratante que han podido ser localizadas, rescatadas y apoyadas. Si Noé Quetzal decía la verdad cuando presumía tener a 150 víctimas, todavía hay muchas que encontrar y salvar.

Si usted, querido lector, conoce a una víctima de trata de personas, por favor, denuncie al 018005533000 o en unidoshacemosladiferencia.com.  En Twitter @rosiorozco
                               
*Presidenta de la Comisión Unidos Vs. Trata

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