Celebración
• Habrá nuevamente dos entradonesde más de 40 mil aficionados, con lo que llegaremos a más de 120 mil aficionados.
Escribo la presente colaboración con la inigualable ilusión de poder asistir a la monumental Plaza
México a las corridas de aniversario en las que se anuncian dos carteles muy atractivos, obviamente el de mañana lunes, ante la despedida del inmenso Pablo Hermoso de Mendoza, provoca una mayor expectación. Celebro que las autoridades judiciales hayan actuado con cordura ante una nueva y absurda disposición de una juez que, con sus respectivas razone$, accedió a generar un ardid para echar para atrás, nuevamente, el permiso otorgado por la delegación Benito Juárez a la empresa del coso de Insurgentes para celebrar dichos festejos taurinos.
La cordura imperó en el juzgado ante las argumentaciones de los abogados de la empresa y esta tarde y mañana acudiré a festejar los 78 años de aquella inauguración de la plaza más grande y cómoda del mundo, tal como rezaban los carteles de antaño, y muy probablemente pasarán por mi mente imágenes de la infinidad de ocasiones en las que acudí con mi abuelo y con mis padres, que desde niño me inculcaron, afortunadamente, la afición a la tauromaquia, a los libros que de ella existen, así como infinidad de obras de arte que a lo largo de su historia ha generado dicha expresión cultural, tan enraizada en nuestras tradiciones, pues estamos también por celebrar 500 años de la primera corrida de toros de la que se tiene registro en las páginas escritas por Bernal Díaz del Castillo en las que relata el primer festejo, allá por 1526, innegable concluir que no es algo nuestro cuando son cinco siglos de constante celebración de festejos en nuestro país. Basta darse una vuelta por la península de Yucatán para percatarse que en todas las poblaciones de dichas localidades de origen maya existe un sincretismo cultural que hace que en las celebraciones de cada pequeña o gran población existan corridas de toros como parte central de dichos festejos del santo patrono, de la virgen venerada o, por la razón que sea, siempre hay toro, que, por cierto, una vez lidiado, es consumido como parte de la gran fiesta.
En ese marco, habrá que festejar que habrá nuevamente dos entradones de más de 40 mil aficionados esta tarde y mañana, con lo que llegaremos a más de 120 mil aficionados entres festejos, después de la muy lamentable prohibición, cifra que desde donde se le vea es muy respetable.
Que se respete la libertad, las tradiciones, la cultura y la afición, que en toda nuestra geografía es mucha, y para certificarlo está la inmensa expectación y cariño con la que estaremos celebrando a la plaza que da y quita, la Plaza México.
