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Nacional

Gerber, un básico de la infancia; 50 años en México

Desde hace medio siglo llegó a México la papilla más famosa del mundo y hoy en día es un alimento infaltable  en la nutrición de miles de niños

Karla Trejo | 27-07-2017

QUERÉTARO.

Es prácticamente seguro que más de uno en su hogar haya probado un Gerber, esa papilla para bebé que no sólo ha facilitado la labor de muchas madres, sino que además ya se ha convertido en un básico de la alimentación infantil y hasta un referente en el desarrollo publicitario en el mundo. 

La firma llegó a México en 1959, estableciendo una planta de producción en el entonces Distrito Federal; sin embargo, unos años después, en 1967, se mudó a Querétaro, donde aún permanece. Esto, para Gerber, es motivo de orgullo y celebración, pues su permanencia en el país ha sido más que relevante.

Para festejar, Gerber inauguró el Centro de Nutrición Especializada, donde bridará información nutricional y mostrará a los visitantes los procesos de fabricación de sus alimentos, los cuales están libres de azúcar añadida, conservadores, colorantes y saborizantes artificiales.

Durante el evento de celebración, al que asistieron directivos de la empresa y funcionarios del gobierno queretano, se informó que para 2020 la marca comprará en México el 100% de las frutas y verduras que requiere, lo que beneficiaría a mil 200 productores de Chihuahua, Durango, Hidalgo, Jalisco y Michoacán.

Así nació

Gerber llegó a México hace poco más de 50 años, pero en realidad surgió hace nueve décadas (en 1927) en Michigan, Estados Unidos.

“Si preparas puré de tomate para adulto, ¿por qué no preparas puré de chícharo para nuestro bebé?”, preguntó un día la señora Gerber a su esposo, Dan Gerber, quien tenía una fábrica elaboradora de alimentos.

Entonces, tras este cuestionamiento arrancó la idea y con ella las pruebas necesarias para hacerla realidad. De hecho, fue su hija Sally, de entonces siete meses de edad, quien probó los primeros alimentos Gerber procesados comercialmente.

Con el éxito que tuvo, Dan decidió que Gerber sería un negocio únicamente de comida infantil, por lo que además investigó para aportar también a la nutrición de los bebés. Así, cada producto va más allá de un sabor agradable.

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