‘Estoy aprendiendo mucho’, asegura Poncho Vera

Hace un año, Poncho Vera dudó al responder si volvería a actuar en una obra de teatro, tras probar el monólogo Defendiendo al cavernícola: “No... aunque nunca digas nunca, ¿verdad?”. Hoy forma parte del elenco de la obra de comedia Toc Toc, curiosamente en el mismo recinto en el que debutó como actor aquel abril de 2022, el Teatro Ignacio López Tarso del Centro Cultural San Ángel.

Morris Gilbert y la productora Mejor Teatro vieron en el conductor del noticiero De pisa y corre, de Imagen Televisión, sus habilidades para comunicar, así que ahora le tocará abordar a un personaje con un trastorno obsesivo compulsivo, o TOC, en esta comedia de Laurent Baffie, con dirección de Lía Jelín, que aborda el tema de la salud mental y emocional.

Ahí compartirá créditos, en alternancia de funciones, con Lola Cortés, Ulises de la Torre, Polo Morín, Pedro Prieto, Leonardo Bono, Omar Medina, Cecilia Arias, Alicia Paola, Dari Romo, Dalexa Meneses y Sandra Quiroz, además de artistas invitados como Patricia Reyes Spíndola, Armando Hernández, Elizabetha Gruener y Yurem.

El debut de Poncho Vera será mañana y de tal experiencia platicó en entrevista con Excélsior.

Me siento muy contento. Es una obra que, está comprobado, es un éxito y ha tenido muchísimas temporadas. La he visto y me parece una obra divertida, principalmente, pero sí con un fondo que vale la pena analizar, que son las enfermedades mentales, y en este caso, los trastornos obsesivos
compulsivos.

Creo que este tema sigue siendo una especie de tabú, por lo menos aquí en México. Existe la idea de que ir a ver a un doctor, a un psicólogo o psiquiatra sigue siendo un tabú, que tacha de locos a quienes acuden o incluso es visto como un lujo, algo inalcanzable, que va más allá de la salud corporal.

En México no existe una cultura de que no sólo tenemos que ir al doctor cuando nos duele algo, sino por múltiples razones, y la salud mental tiene una relación directa con la felicidad, no hay que tratarlo siempre con solemnidad, sino ponerlo en la mesa como algo que se puede tratar de diferentes maneras, como a través de la diversión”, expresó Poncho Vera.

El conductor agradeció que el equipo del productor Morris Gilbert volviera a confiar en él, tras Defendiendo al cavernícola, en la que finalizó su ciclo.

Este es otro reto que estoy tomando con mucha conciencia y responsabilidad, porque es un trabajo actoral diferente al cavernícola, que era un monólogo el cual siempre vi con tintes de stand up.

Ahora es una actuación más en forma, para la que me estoy preparando con mucho entusiasmo y responsabilidad, porque sí estoy aquí trabajando con otros actores, en una obra que es un clásico de la cartelera. Quiero hacer un trabajo a la altura de las circunstancias, así que estoy muy entusiasmado y nervioso. Estoy ensaye y ensaye, estudie y estudie, con la humildad de que estoy aprendiendo mucho. Estoy agradecido, comprometido y feliz”, dijo.

Vera interpretará a Alfredo, quien tiene síndrome de Tourette y coprolalia. Es así que el personaje se expresa involuntariamente con palabras obscenas y socialmente inapropiadas o comentarios despectivos.

Tiene impulsos incontrolables, movimientos incontrolables corporales, y lo lleva a decir groserías, a hacer gestos obscenos e insultar contra su voluntad. Es una condición penosa y muy difícil. Son cosas raras, pero suceden. Esto no se cura, según lo que he leído, pero se puede controlar. Ya pensando en una comedia, tiene su parte muy divertida. Nos lleva a reflexionar un poco sin pretensiones, de cómo es la mente humana”, explicó.

Poncho reveló que, a partir de este texto, también ha reflexionado acerca de sus propios trastornos. Uno de ellos, de manera personal, es su obsesión por el orden.

Tengo este TOC del orden, todo tiene que estar acomodado de cierta manera. Es una cosa que he trabajado desde hace mucho tiempo, pues si las cosas no están ordenadas, no de la manera en la que lo tengan que estar, sino en las que yo creo que lo deben estar, sí me causa una sensación de molestia. Por ejemplo, si veo algo tirado en el piso en mi cuarto, me cuesta mucho trabajo dejarlo así, me produce incomodidad.

Es algo que he tratado por temas de convivencia, por tener tranquilidad. Sin llegar a ser algo que no me permita ser funcional, es una cosa medio incomoda. Es algo que he trabajado en diferentes terapias, así que, en esta obra, me identifico con eso”,
compartió.

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