Contentos acatan protocolos en primaria; el reto será el otro 90% de alumnos

CIUDAD DE MÉXICO.

La escuela tiene 250 niños y ahorita estoy hablando de 27 en presencial, pero cuando vengan todos sí vamos a presentar el reto de 'respeta tu distancia', 'no debes compartir alimentos’; ahorita lo entienden muy bien los que vienen".

El balance para Excélsior Digital lo hace la directora de la escuela primaria Montes Azules, Lilia Jiménez Altamirano, tras una semana del regreso a las aulas.

En general, los pequeños respetan las medidas sanitarias, aunque algunos intentan quitarse el cubrebocas para jugar, sin embargo cuando les piden que lo porten no han encontrado mayor dificultad.

Claro que se trata de poco más de 10 por ciento de la matrícula la que acude por día a las aulas. El gran reto será el regreso del 100 por ciento de los alumnos.

De los 250 alumnos con los que cuenta la escuela ubicada en la colonia Narvarte, 50 solicitaron asistir a las aulas a partir del pasado 7 de junio.

En la primera semana se recibió a 12 niños por salón y se habilitaron sólo dos aulas, donde se atienden dos grados por día: primero y segundo grado acuden un día, tercero y cuarto, otro día, y quinto y sexto va sólo.

El lunes de la semana pasada acudieron 18 niños a la bienvenida; el martes no hubo clases; el miércoles, nueve pequeños; el jueves, nuevamente 18, y el viernes sólo se presentaron ocho alumnos.

Con tal cantidad de alumnos es posible privilegiar la estancia en espacios abiertos, como a la hora del recreo, cuando bajan al patio y comen su ‘lunch’ sentados en sillas.

Desde que los recibo respetan y ellos mismos estiran brazos para decir ‘esto es metro y medio’", compartió la directora.

Tenemos mucho cuidado en cuanto a la sana distancia, respetamos metro y medio entre silla y silla; afortunadamente la escuela pertenece a la Secretaría del Bienestar —me refiero al edificio— y se observa todo limpio, también tenemos apoyo de seguridad y de limpieza".

Además, previo al regreso a clases, se entregó a los papás una lista de útiles escolares que incluía gel antibacterial y un cubrebocas extra.

Tampoco todos los maestros optaron por las clases presenciales, así que la directora, una maestra de grado y un profesor de inglés son los que actualmente se hacen cargo del alumnado presencial.

Por el momento Jiménez Altamirano valora como exitoso el regreso a las aulas, ya que los alumnos que han asistido están generando interés en sus compañeros que aún están en casa.

Los niños han jalado a otros, entonces ya tengo más solicitudes de sexto, pero ya les dije: ‘sólo hay 12 lugares’, no puedo atender a más porque no hay más personal, si tuviera yo más personal que hubiera querido regresar pues tendríamos todos los salones".

Los otros retos.

La directora de la primaria Montes Azules comparte que encuentra rezago en los niños que no tienen las mismas oportunidades socioeconómicas.

Tengo de los grandes, de los de sexto, niños que están muy bien, que su aprendizaje en línea les fue muy bien, para algunos resultó muy favorable porque pudieron tener contacto más directo con la maestra en línea”, asegura.

Sin embargo, hay alumnos a los que se les notan carencias en aspectos básicos, como sucedió con los más pequeños, quienes no tienen orden para escribir en los cuadernos.

Además, el hecho de que muchos padres también estén trabajando en casa ha resultado un obstáculo más que un beneficio para el aprendizaje a distancia.

No les dedican el tiempo. Sí los conectan (a clases), pero no pueden subir tareas o a veces no los conectan porque se empalma con su trabajo”, refirió.

Otro aspecto que deberá tratarse es el socioemocional, debido a que hay alumnos que perdieron a algún familiar a causa de la pandemia.

Clases lúdicas.

La profesora Lilia Jiménez, quien lleva 11 años como directora de la escuela Montes Azules, compartió que en la primera semana de clases buscó que de esta forma reafirmaran los temas que abordaron virtualmente.

Sobre todo lo que yo estoy priorizando que trabajen es creación de textos: que puedan redactar, escribir, que sea lúdico su aprendizaje, entonces estamos construyendo figuras, cuerpos geométricos con papiroflexia, origami, en específico, y a partir de allí ellos ya van reafirmando que si el triángulo, el cuadrado, el cubo…”, detalla.

Los menores también toman una hora de inglés y educación física e independientemente de sus ocho horas de clases presenciales a la semana, tienen la opción de conectarse a las clases virtuales.

Un día de clases en la 'Nueva Normalidad'.

Los niños hacen fila sobre la banqueta de la calle Lázaro Cárdenas acompañados de un adulto, en espera de que la directora o un maestro los acompañe para ingresar.

A las 07:50 horas ingresan, les toman la temperatura con termómetros digitales y después les pone sanitizante y gel antibacterial. Finalmente entregan un consentimiento en el que sus papás afirman que no tienen ningún síntoma de covid-19.

Una vez que inició el horario escolar realizan activación física en el aula de cantos y juegos, para posteriormente dirigirse al salón de clases.