Gallos con autoridad; vencen a domicilio al Atlas

Querétaro ganó en el inicio del Apertura 2015 mostrando el buen futbol y orden, las mismas virtudes que tuvieron el torneo pasado al alcanzar la final

GUADALAJARA, 26 de julio.- El estadio vacío fue testigo de la primera victoria de los Gallos en el torneo. En el Jalisco, vetado un juego sin público, el Atlas chocó ante un rival más pulido, que certificó el subcampeonato conseguido el torneo anterior con el pulso de buen futbol y contundencia que le caracterizó.

Emanuel Villa anotó muy pronto en el juego, anestesiando el juego ofensivo que Gustavo Matosas intentó poner en el campo y que desde el América no le resulta. Luego vino la recuperación de Camilo Sanvezzo, el regreso de un goleador innato. El brasileño, que se pasó en el hule de la recuperación los últimos seis meses, saltó del banquillo en el segundo tiempo para sentenciar un partido muy táctico de los Gallos, bien pensado y definido en el momento preciso.

Cabe señalar que Thiago Volpi, el arquero del Querétaro, tuvo una actuación superlativa, al menos volando en tres ocasiones para detener disparos que llevaban etiqueta de gol. Su seguridad en el arco invita al placer de verlo atajar cada que se puede y, con ello, brinda un espectáculo anexo al propio juego de los Gallos, siempre compactos, independientes ya de figuras internacionales y con mucho callo en el terreno de juego, producto también del trabajo estratégico de Víctor Manuel Vucetich.

Avisó el Querétaro desde el inicio que lo suyo es cosa seria. Nadie hace una floritura ni se descompone buscando una gloria personal sino que todo va en conjunto y en pos de lo colectivo. De esa forma llegaron varias veces en el primer tiempo hasta irse arriba en el marcador.

El estadio, tan silencioso como una oficina de madrugada, dejaba escuchar cada sonido del campo, desde un aullido de dolor por un faul hasta las indicaciones de Matosas con ese acento porteño que lo llevaron a buscar soluciones en el banquillo.

Apostó por Gonzalo Bergessio, un refuerzo interesante de gran calidad que se cansó de poner balones a modo para que Fausto Arizala las fallara. Y cuando los disparos no iban desviados, Thiago Volpi saltaba como felino para salvar su portería.

Cediendo el esférico, Querétaro esperó paciente el momento. Vucetich sabía que era el tiempo de Sanvezzo. El goleador está de regreso y los Gallos lucen más fuertes.

 

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