Morena confía en apoyo; prevé buenos resultados electorales

CIUDAD DE MÉXICO.

Al frente de la bancada de Morena en Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velasco afirma que en 2021, en libertad, los mexicanos van a decidir entre un proyecto que gobernó 30 años, generando una deuda de más de 11.5 billones de pesos, con 30 millones en pobreza extrema y “el país que estamos en proceso de construcción y de trasformación”.

En charla con Excélsior, el legislador confía en que, en medio de la pandemia, a la que califica como una calamidad, con prudencia y sensibilidad el gobierno y su partido encontrarán el espacio para refrendar el apoyo del electorado.

Explica que gracias a la cuestionada eliminación de los fideicomisos, ahora México es una de las 10 naciones que accederá a las vacunas contra el covid y considera que fue mezquina la pretensión de frenar esa medida porque quienes al oponerse buscaban que México fuera rehén de sus limitaciones en materia de recursos.

Queremos su oportunidad, su confianza para que se consolide y se vean más resultados que, de manera significativa, habrán de cambiarle el rostro a México que vivió con molestia, con enojo, con desesperación, con desengaño, con frustración. Y se conviertan en rostro alegres, sonrientes, esperanzadores”, alega.

A dos meses de haber tomado las riendas de la hegemonía legislativa, con una reiterada cita de Mariano Azuela, Mier Velazco advierte que la agenda del gobierno no se detendrá: “Hay que aprender a escuchar a los de abajo, a mirarlos. No pasa nada: la inflación se mantiene, la deuda no ha crecido y el presupuesto, austero, ahora atiende a la gente, sin desbordar la paridad cambiaria”.

El legislador por Puebla y a cargo de 250 representantes del partido en el poder en San Lázaro es vehemente al exaltar que, con orgullo, su grupo parlamentario puede decir que, gracias a la redistribución presupuestal, ahora 15 millones de adultos mayores cuentan con la posibilidad de una vida superior.

Dice tener afecto por sus compañeros de la oposición, pero alerta: “Nosotros no vamos a renunciar a la agenda que tenemos y lo haremos con respeto, con civilidad. No vamos a avasallar. Lo haremos dialogando, tratando de que se sumen a un proyecto que, de verdad, tiene en el centro del interés a las y los mexicanos y su bienestar”.

Exmilitante, exdiputado local y federal y exfuncionario del PRI, Mier Velazco sostiene que el voto esperanzador de 30 millones de mexicanos que eligió al gobierno también les dio ese mandato a los diputados de Morena.

Los otros grupos parlamentarios tienen su propia visión de país. Les tocó 70 años gobernar a unos y de manera alternante al PAN y al PRI: en los hechos, gobernaron juntos en los últimos 30 años. Y el Pacto por México fue la cereza en el pastel; en minutos reformaron la Constitución para lo que ellos llamaban las reformas estructurales que podían darle un mejor devenir a México. No fue así: desafortunadamente, entre las patas nos fuimos todos.

Nos acostumbramos a ver los indicadores, lo que opinaban las calificadoras internacionales, el Consenso de Washington, los hombres de negocios, los banqueros, la Bolsa de Valores. Pero nunca nos detuvimos a ver cómo estaba afectando eso a los de abajo. Ése es el tema. No significa desatender los indicadores macroeconómicos y dejar de escuchar a los de arriba, pero ellos también tienen que ser solidarios, empáticos y aprender a ver hacia abajo. Porque son 53 millones de mexicanos los que están en situación de riesgo por decisiones que se toman desde la comodidad de un edificio de 30 o 40 pisos. Pero nadie puede trasformar una realidad que nunca ha vivido”, sostiene.

Impulsor de Morena desde 2017, Mier plantea que aquellos con más de tres décadas en la función pública, y que gobernador al país, “no conocen otra manera de hacer las cosas no saben, ese es el problema”.

Se refiere a los funcionarios que se formaron en Yale, Chicago, MIT para gobernar un país que nunca conocieron. “Para ellos la realidad está en Polanco, en la maravillosa avenida Reforma, Palmas, pero nunca en los más de mil cien municipios con población indígena ni en las colonias populares. Ese es el problema”.