‘La peor noche’: migrante tras reubicación en El Chaparral

Eran casi las 05:00 horas cuando llegaron al albergue Improvisado El Chaparral, en Tijuana, Baja California, más de 100 elementos de la Guardia Nacional, para la reubicación de los migrantes que allí vivían.

Los elementos federales no estuvieron armados durante el operativo que tuvo como objetivo reubicar a los migrantes que estaban a punto de cumplir un año viviendo en las inmediaciones de la Garita el Chaparral.

A mí se me parte el corazón, porque en Honduras dejé todo tirado, vine a Tapachula dejé todo tirado, aquí tenía mi estufa, mis trates, donde darle de comer a mis hijos, vuelven a quedar tirados, en la calle y sin nada", comentó Graciela, una migrantes hondureña.

Los migrantes aún dormían cuando elementos del Gobierno de Baja California, y del Ayuntamiento de Tijuana llegaron a avisar que tenían que desalojar lo que había sido su casa. Ropas, cobijas, alimentos, todo lo tenían que dejar para ser trasladados a un albergue.

"La peor noche, porque uno dice: ‘bueno nos dormimos’ y ya uno siente que algo va a pasar, porque de madrugada despierta y dice: ‘¡qué raro!’, cuando a veces no sucede, ya de repente llegaron personas que nos despertáramos, y ya cuando salimos todos ahí, los guardias y policías", comentó Graciela.

El desalojo se desarrolló de forma pacífica y sin connatos de violencia. El albergue donde se encontraba El Chaparral es una garita que no estaba en funciones, lo que ocasionaba el descontento a los usuarios de las garitas.

"El que el campamento se mantuviera ahí, generaba una animadversión en la gente que vive en Tijuana que cruza todos los días a trabajar porque están obligados a cruzar por una sola garita por lo tanto el tráfico era mayor, si generaba molestia en ese sentido también", mencionó la subdirectora de la ONG AL Otro Lado, Soraya Vázquez.

Cabe mencionar que algunos migrantes tenían casi 11 meses viviendo en el campamento de El Chaparral.

Diez meses, pues prácticamente sí (es nuestra casa), porque no tenemos pariente, no tenemos nada", dijo Melchor, un migrante originario de Michoacán.

Por su parte, la alcaldesa de Tijuana mencionó que actualmente había más de 380 personas y 165 niños y niñas que tenían que ser atendidos.

"La salud, la comunicación binacional, sobre todo el interés supremo de la niñez por eso el Estado y nosotros estamos participando y la Guardia Nacional", comentó la edil de Tijuana, Montserrat Caballero.

Al finalizar el operativo, los migrantes dijeron adiós a este campamento improvisado, con sus pocas pertenencias fueron trasladados a 3 albergues en Tijuana.

*jci