El feminicida serial “El vampiro” escapa de prisión en Kenia; se le acusa de 42 asesinatos

El feminicida serial, Collins Jumaisi Khalusha, conocido como “El vampiro” por su presunta participación en al menos 42 asesinatos, logró escapar de la custodia policial en la estación de policía Gigiri, ubicada en Nairobi.

Khalusha, junto a otros 12 detenidos, se dio a la fuga la madrugada del martes, lo que ha desatado una ola de pánico e indignación en la comunidad, al tiempo que se cuestiona la seguridad y la eficacia de las fuerzas policiales en Kenia.

El jefe de la Dirección Nacional de Investigaciones Criminales, Mohamed Amin, fue quien confirmó la fuga, señalando que ocho oficiales, incluidos los comandantes de la estación, habrían colaborado en la huida.

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Este incidente ha generado gran controversia, ya que pone en tela de juicio la integridad y la confiabilidad de las fuerzas del orden en el país.

Asesino en serie sin remordimientos

Khalusha, apodado “El ampiro”, es un asesino en serie keniano que había sido arrestado en julio pasado. Su captura se produjo tras la aparición de 10 cuerpos mutilados en una cantera en el barrio Kware de Nairobi, un hallazgo que causó horror y repulsión en la población.

En su confesión, Khalusha admitió haber matado a esas 10 mujeres y a otras 32 en un lapso de dos años, incluyendo a su propia esposa, cuyo paradero se desconocía desde hace tiempo.

Mohamed Amin describió a Khalusha como "un asesino en serie psicópata que no respeta la vida humana". Estas palabras reflejan la brutalidad y la frialdad con la que Khalusha habría cometido estos crímenes, en los cuales no solo privó de la vida a sus víctimas, sino que además las sometió a actos de extrema violencia.

Fuga: un plan Meticuloso

Según informes oficiales, la fuga ocurrió en las primeras horas del martes. Khalusha y los otros detenidos lograron cortar una malla metálica que cubría las ventanas y las rejas de sus celdas utilizando herramientas improvisadas.

Una vez fuera de las celdas, escalaron el muro perimetral de la estación, aparentemente con la ayuda de cuerdas y otros materiales. La fuga solo fue descubierta cuando los oficiales fueron a llevar el desayuno a los detenidos y encontraron las celdas vacías.

La noticia de la fuga ha generado alarma en Nairobi y en todo el país, dado el peligro que representa Khalusha para la sociedad. Las autoridades han intensificado la búsqueda, pero hasta el momento, el paradero de “el vampiro” sigue siendo desconocido.

Complicidad policial

El Inspector General de Policía interino, Gilbert Masengeli, ha confirmado que los ocho oficiales acusados de colaborar en la fuga de Khalusha y los demás detenidos están siendo sometidos a un proceso disciplinario.

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Sin embargo, no se han divulgado detalles específicos sobre las sanciones o el tipo de acciones que se tomarán contra ellos.

Este incidente plantea serias preguntas sobre la corrupción y la falta de profesionalismo en la policía keniana, temas que han sido recurrentes en el país.

ORP