Verónica Toussaint gana Ariel por Mejor Coactuación Femenina

CIUDAD DE MÉXICO.

El Ariel tenía tantas ganas de llegar a las manos de Verónica Toussaint, que no pasaron ni cinco minutos del inicio de la ceremonia número 60 cuando Paulina Gaitán y Daniela Vega la proclamaron como la ganadora de la estatuilla en la categoría de Coactuación femenina por su trabajo en la cinta Oso polar.

Este premio se lo quiero dedicar a todas las actrices que en el camino hemos tenido dudas de si servimos o no para esto.

A todas las que nos han dicho ‘no tienes nombre’ y ‘no eres taquillera’, para que confíen en que va a llegar un director como Marcelo Tobar y les va a sacar lo mejor de ustedes y su trabajo”, expresó con dedicatoria especial al director de la cinta rodada completamente con teléfonos celulares.

Con una enorme sonrisa que reflejaba la felicidad que sentía por conseguir la preciada estatuilla en su primera nominación, la conductora del programa ¡Qué importa!, de Imagen Televisión, agradeció también al gremio cinematográfico que la recibió con los brazos abiertos.

Muchas gracias a todas las personas que me apoyaron y que han estado conmigo todos estos años, pero sobre todo muchas gracias a ustedes, qué fuerte es estar aquí, los admiro y muchísimas gracias. Me siento muy afortunada. ¡Qué chingón!”, añadió Toussaint, quien fue despedida con una enorme ovación.

La gala organizada por la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, fue inaugurada unos minutos después de las 20:00 horas por un dueto entre las cantantes Lila Downs y Joy Huerta, enmarcadas por el espléndido escenario del Palacio de Bellas Artes.

Posteriormente, Héctor Bonilla presentó un video que refleja “cómo el cine mexicano ha evitado ser cómplice del silencio para atacar la problemática que nos tiene tan aplastados.

El cine mexicano se une a su sociedad para poner un hasta aquí, en momentos que atravesamos una época siniestra y en la que necesitamos una sociedad participativa para sacar adelante al país”, pronunció el célebre actor antes de la proyección de fragmentos de películas como La sombra del Caudillo, Canoa, Colosio y Güeros.

Ese tono político-social permeó la gala del Ariel en diversos discursos de sus ganadores como en el caso de Miguel Rodarte (Mejor Coactuación Masculina) o Diego Enrique Osorno (Mejor Corto Documental), e incluso formó parte del programa de la ceremonia misma, pues previo a la entrega del Ariel de Oro al cinefotógrafo Toni Kuhn se realizó un homenaje a los tres estudiantes de cine tapatíos desaparecidos en marzo pasado que posteriormente fueron declarados como asesinados.

Durante la alfombra roja, la organización del órgano presidido por Ernesto Contreras incluso repartió a los invitados botones, listones y playeras con la leyenda “No son tres, somos todos.”

Antes de entregarle el Ariel de Oro a Kuhn, el cineasta Juan Mora Catlett pidió a los asistentes a la ceremonia que se pusieran de pie para honrar con un minuto de silencio a los desaparecidos del país.