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Función

Forest Whitaker, premiado por su labor altruista

El actor fue reconocido por la Unesco por su trabajo para ayudar a las comunidades necesitadas. Además, comenzó con la filmación de Megalopolis, cinta de Francis Ford Coppola

Fabián W. Waintal/ Especial | 18-04-2023
Forest Whitaker
Por su estatura, jugó futbol americano, sin embargo, se inclinó por el medio artístico donde ha logrado premios como el Oscar y la Palma de Oro. Foto: AFP

“Estoy muy entusiasmado por filmar con alguien como Francis Ford Coppola”, dijo Forest Whitaker en relación a Megalopolis, la película en la que está comenzando a trabajar con el reconocido director. 

“Iniciamos hace un par de años, desde que hablamos del proyecto. Y él ha estado dándole forma al guion. Había estado trabajando durante toda la pandemia y recién ahora empezamos a filmar. Ya era hora. Coppola es un director de cine increíble y la historia trata sobre la estructura de poder en la ciudad, entre conservadores y progresistas. Es todo lo que puedo contar, no puedo hablar más al respecto”, dijo.

De lo que sí habló, a pesar de que es un tema del que no quiere reflectores es del reconocimiento que recibió por parte de la Unesco. Se trata del Premio Internacional de la Paz por su trabajo en obras de bien desde hace diez años, para ayudar a sectores de la población vulnerables, sin siquiera publicitarlo.

“Poca gente lo sabe, pero vamos a las comunidades, tratando de ofrecerle a la gente las herramientas necesarias para prosperar, financiando negocios.

“Nuestra organización lleva financiadas más de 300 empresas y seguimos haciéndolo. Cuando la gente cuenta con un sentido de identidad y prosperidad, pueden seguir adelante con sus vidas. No se le puede pedir a nadie que haga algo sin ofrecerle nada a cambio. Y es lo que hacemos, en diferentes formas.

“Yo quería empezar con un proyecto en Tijuana, por ser una de las ciudades más violentas del mundo, pero también por estar en la frontera del lugar donde yo me crie, en California. Y fuimos con un programa que todavía sigue activo, lo empezamos en el año 2012 y después seguimos en Chiapas. Así es como trabajamos con centros de construcción que puedan actuar como una puerta de oportunidades para la comunidad, generando también los conocimientos necesarios. Queremos expandirnos a otras áreas de Latinoamérica, desde hace años”, confía a Excélsior.

Además de ser el protagonista de muchas cintas, también ha hecho otros con personajes más chicos, pero también ha incursionado como productor.

“La idea es seguir filmando cada vez más con mi productora. Buscaremos encontrar diferentes voces que puedan darle vida a una historia que a lo mejor no tiene otras oportunidades de ser vistas.”

Platica que cada vez está más abierta la posibilidad de mostrar historias que muestren la dicersisad.

“Actualmente es mucho más posible gracias a las oportunidades que brindan las plataformas de streaming. Es un mercado que permite plantar raíces frente a ciertos grupos, en base a suscripciones. Y creo que de esa forma es posible utilizar los datos para expandir el interés. Este es uno de los grandes beneficios del streaming.

“Creo que necesitamos insistir, que la gente sepa que se necesita incluir a todos a la hora de contar historias, porque todos somos parte del mismo mundo y la gente necesita escuchar voces distintas.

No ha vuelto a dirigir desde Travesuras de una princesa, que hizo con Katie Holmes y Michael Keaton.

“No tengo planes inmediatos para volver a dirigir. Lo hice en ocho películas y fue una gran experiencia, pero lleva demasiado tiempo también. El compromiso es muy grande, tendría que encontrar la historia apropiada que me atrape lo suficiente como para volver a dirigir. Tampoco quiero decir que no va a pasar, solo sé que por ahora no lo estoy pensando hacer.

“Para encontrar cada proyecto que hago, como productor, trato de encontrar algo que levante el ánimo del espectador, en cierta forma, tratando de enseñar o entender algo en particular, como una forma de contribuir a un diálogo. Y como actor, me fijo en el guion o el director, pero también mis instintos y mis creencias personales sobre el mundo que me atraiga a hacer algo en particular.

“Por ejemplo, Godfather of Harlem’ es una serie sobre la mafia de los años 60, pero también exploramos las estructuras sociales. Y por ahí, lo que me interesó es la estructura moral que yo también respeto. Por eso acepté hacerla.”

Habiendo nacido en Texas, el 15 de Julio de 1961, Forest Steven Whitaker llegó a Hollywood de la mano de sus padres, cuando se mudaron en el año 1965 al Sur de Los Ángeles. Con casi dos metros de altura, eligió en un principio el deporte como el futbol americano, hasta que logró una beca en la Universidad del Sur de California USC, donde estudió música, antes de inscribirse en la Universidad de Berkeley para inclinarse por la actuación.  A los 21 años ya estaba trabajando en cine, con la comedia Fast Times at Ridgemont High’ donde justamente interpretó a un jugador de futbol americano. Pero la primera vez que llamó la atención fue en otro estilo de juego, en la famosa escena de pool donde le ganó a Paul Newman en El color del dinero.

 Así fue como consiguió roles más importantes en Platoon y Good Morning, Vietnam, hasta ganar el premio a Mejor Actor en Cannes por su trabajo en Bird. Pero nada se compara con el Oscar que ganó como Mejor Actor por interpretar al verdadero dictador de Uganda, Idid Amin en El último rey de Escocia. Ese mismo año develó una   estrella con su nombre en el Paseo de la Fama de Hollywood. Y en el Festival de Cannes le entregaron otra Palma de Oro en honor a su carrera profesional.

Bird había sido la primera vez que tuve un rol protagónico en cine.  Y cuando estuve en Cannes, el premio terminó siendo el primer reconocimiento internacional como actor. Cambió mi vida y la trayectoria de mi carrera, en todo sentido, porque permitió que me vieran como artista y no como un actor más. 

“Era muy jovencito, nunca antes había dado entrevistas, ni siquiera había estado antes en un festival de cine. Era todo demasiado para mí. Ni siquiera sabía como responder frente a Clint Eastwood (lo dirigió en Bird), cuando todos gritaban su nombre. Todo era nuevo para mí. Y cuando me entregaron el premio como Mejor Actor, fue el mejor regalo que jamás pude haber imaginado. Me acuerdo que la noche anterior, mi hermano que había viajado conmigo, me contó que se hablaba sobre la posibilidad de darme algún premio. Yo no lo creí, no me parecía que fuera cierto. Y terminó todo siendo muy hermoso.

“Cuando me invitaron a Cannes para entregarme la Palma, me pareció que era un gran honor y fue todavía más especial, por ser el 75 aniversario del Festival”, recordó.   

 

Más de Forest

  • Tiene 61 años.
  • Mide 1.88 m. de altura.
  • Tiene cuatro hijos.
  • Se convirtió en el cuarto afroamericano que obtuvo el Oscar en la categoría de Mejor Actor.
  • Es el presidente de la compañía JuntoBox Films, con la que le da oportunidad a talentos e historias frescas.

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