LONDRES.
Un aficionado del Brighton fue detenido en relación con unos actos racistas contra los jugadores del Chelsea durante un partido de la Liga Premier y otros dos seguidores fueron arrestados en incidentes separados ocurridos en el mismo encuentro en torno a un abuso homofóbico contra los fanáticos del equipo rival.
El director ejecutivo del Brighton, Paul Barber, dijo que los incidentes eran “desagradables” y pidió a los aficionados reportar cualquier acto indebido que ocurra en el estadio.
Si la posibilidad de una prohibición de por vida para ver a sus equipos jugar no es un elemento disuasivo lo suficientemente fuerte, tendremos que plantearnos si los tribunales deberían tener la autoridad para dar castigos más severos”, señaló Barber. “Estamos cansados de que la reputación del futbol se vea manchada por este tipo de personas”.
“Me es imposible comprender cómo y por qué algunos individuos piensan que es correcto comportarse de esta forma”, añadió.
Brighton igualó 1-1 con el Chelsea el miércoles.
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