Ant-Man

Por Adrián Ruiz Villanueva

Creado en 1962 por Jack Kirby y Stan Lee, este superhéroe se caracterizó por ser uno de los fundadores de Los Vengadores, en compañía de Avispa, como lo destaca el cómic de 1963. Ahora llega una cinta donde todo se centra en este personaje, donde conocemos su génesis en medio de una vis cómica latente.

        Partiendo de 1989, en el parcialmente completado Triskelion, el Ant-Man original, Hank Pym, decide presentar, en una forma poco violenta, su renuncia a S.H.I.E.L.D., después de descubrir que estaban tratando de duplicar su tecnología de reducción que hace posible a Ant-Man.

          Pym tiene la certeza de que la tecnología es peligrosa y se compromete a guardar el secreto hasta su tumba. Su empresa le es movida y ahora vive relegado, incluso su propia hija tiene ciertas rencillas hacia con su progenitor.

        Ahora los avances tecnológicos han cobrado pasos agigantados y al que presumía como su sucesor, Darren Cross, está a punto de descifrar el secreto. De igual modo se ha creado un traje similar con poderes sobrehumanos, los cuales podrían fungir con fines militares.

      Es así como Pym decide ayudarse de un personaje en particular, Scott Lang.

   Scott Lang, quien posee ciertos conocimientos de tecnología pero también es un ladrón de poca monta,  ha sido liberado de la prisión estatal de San Quentin, luego de haber cometido un crimen que causa admiración y asombro, pero al mismo tiempo le impedirá un trabajo decoroso. Paralelo a ello, Lang es considerado como un héroe por su pequeña hija Cassie, sin embargo habrá que demostrarlo.

          Ante estas líneas surge una cinta con un sentido del humor bastante marcado, el principal vehículo es el talento nato para la comedia de Rudd, quien además se sometió a las rigurosas dietas y ejercicios que demanda ser un héroe de Marvel. Así queda comprobado en algunas escenas, donde quitarse la playera es primordial.

       El ganador de dos premios Oscar, uno como productor y otro como actor, Michael Douglas, otorga ecuanimidad y peso a la premisa. Destaca en la primera escena, donde gracias a la tecnología luce como en sus mejores ayeres y queda asentado el carácter determinante y a veces violento que Pym puede llegar a tener.

          Evangeline Lilly regresa a un Blockbuster, ahora como Hope Van Dyne, hija de Pym, con un carácter arrogante, el cual irá cambiando conforme pase la trama. Destaca en sus escenas de artes marciales, donde hace ver como estúpido al protagonista y las cosas se ponen de color hormiga. Sin embargo, las palmas del sentido del humor se las lleva Michael Peña, como Luis, quien en sus contadas intervenciones es capaz de robarle escena a cualquiera que se ponga en su camino.

       Ant-Man es redonda, ofrece dinamismo, sentido del humor, efectos especiales y un  buen desarrollo de personajes.

        El resultado es una cinta explosiva y cómica, inversamente proporcional al tamaño de una hormiga.  

DIRIGE

• Peyton Reed.

ACTÚAN

• Paul Rud.
• Michel Douglas.
• Evangeline Lilly.