Ciudad solidaria

En Ontario, el gobierno aprobó hacer una prueba piloto por medio de la cual se daría un apoyo a todos aquellos que tuvieran un ingreso por debajo de la línea de pobreza...

Hoy se puede decir que la idea de un Ingreso Básico Ciudadano (ICU) o renta básica, ya no sólo como idea sino como certeza, es común en todo el mundo y, recientemente, se ha incrementado la necesidad de él ante las condiciones de la globalización, ahora tan vituperada por sus antiguos defensores.

Recientemente, han aparecido algunos hechos que creo interesante compartir, como por ejemplo, que los holandeses veían al ICU como un proyecto imposible de financiación, les parecía muy bueno, pero muy difícil de llevar a la práctica. No obstante, con la crisis económica que ahora los ha dejado sin crecimiento real de empleo y con más de dos millones de personas en los llamados contratos flexibles, este país voltea a ver la propuesta, a pesar de ser uno de los diez más ricos del mundo.

Recientemente, los dos diarios más importantes de dicha nación hicieron una encuesta sobre el tema y el resultado fue que cerca del 44 por ciento que la respondieron está en favor de ICU, 45 por ciento en contra y el resto dijo no conocerlo.

Los partidos de izquierda y los verdes del país holandés están mayoritariamente en favor, incluso, el Partido de la Libertad del señor Wilders, quien según los medios es el Trump local, está dividido con respecto al ICU, pues el 36 por ciento está en favor. Adicionalmente, 60 mil personas han firmado una petición de que en marzo del año que viene se vote para que en 2018 se otorguen 800 euros a cada ciudadano holandés.

En Canadá, en la provincia de Ontario, el gobierno aprobó en junio de este año hacer una prueba piloto en abril del 2017, por medio de la cual se daría un apoyo incondicional a todos aquellos que tuvieran un ingreso por debajo de la línea de pobreza determinada y durante la prueba seguirían recibiendo todos los apoyos que perciben de los diferentes programas contra la pobreza. Esta prueba piloto es parecida a la que se celebró en la provincia de Manitoba hace algunos años. En el programa del Partido Liberal, que hoy gobierna Canadá, el ICU está como uno de sus principales proyectos.

Incluso en China, la segunda potencia económica del mundo, la propuesta está teniendo difusión ya que sus defensores arguyen que está alineada con la esencia del socialismo y la economía de mercado. Actualmente, existe en ese país un programa denominado en su idioma “Dibao”, mismo que, supuestamente, es una garantía de un mínimo ingreso a todos aquellos que no alcanzan a superar la línea de pobreza. Sin embargo, ha recibido muchas críticas por lo burocrático y lento que es, debido a que funcionarios tienen que visitar y decidir quién es candidato a recibirlo y

quién no. Por eso ya se está promoviendo la propuesta del ICU.

Existe una población denominada Huaidi, en la provincia de Hebei, que con seis mil habitantes está teniendo resultados espectaculares en beneficio de sus miembros, todos tienen casas iguales, la educación y salud es generalizada y gratuita. Además, cada habitante recibe 220 dólares al año (los padres de los menores de 18 años reciben la aportación correspondiente a sus hijos), mismos que son depositados directamente en una cuenta bancaria personal, sin intermediación de autoridad alguna.

Recientemente, en la última versión disponible del proyecto de dictamen de la propuesta de Constitución Política de la Ciudad de México, encontramos que el artículo 14, llamado Ciudad solidaria, apartado A, numeral 3, textualmente dice: “Toda persona desde su nacimiento tiene derecho a un ingreso básico universal y la ciudad garantizará su cumplimiento de manera progresiva”.

Celebramos la inclusión de este tema, aunque sea a manera de declaración, ya que además viene con otra serie de derechos, los cuales también se dice serán garantizados de manera progresiva. Esperamos que por estar en el apartado A y casi como primer derecho tendrá mayor oportunidad de cumplirse.

Habremos de darle seguimiento para que, tal como se ha propuesto en otros países, por lo menos, se haga una prueba piloto en nuestra ciudad capital que permita demostrar lo viable y necesario que es el Ingreso Básico Ciudadano.

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