Un juego sin importancia en México 86

El choque por el tercer lugar significa un bálsamo para atenuar la frustración de los que quedaron derrotados y tristes

thumb
El belga Jean Marie Pfaff enfrenta al francés Jean-Pierre Papin en el duelo por el tercer puesto, en el que Papin marcó el segundo tanto galo. Foto: Archivo Excélsior

CIUDAD DE MÉXICO.

Un día antes del partido por el tercer lugar entre Francia y Bélgica, Michel Platini se asomó al estadio Cuauhtémoc sin ropa para entrenar. Un short y chamarra azules y una gorra. La estrella del conjunto galo, el tres veces balón de Oro, campeón eterno con la Juventus italiana y líder del cuadro campeón de la Eurocopa en 1984 había despertado desalentado y sin el mínimo interés de participar con Francia. Hasta cierto punto tenía razón. ¿A quién le importa jugar por el tercer puesto en una Copa del Mundo?

Henri Michel, técnico de Francia, había dicho en conferencia que utilizaría a los jugadores sustitutos para dicho encuentro. “Lo que sigue no tiene sentido”. Misma respuesta de su antagonista, el estratega belga Guy This, quien señaló que “el torneo perdió atractivo y el tercer lugar no tiene importancia”.

Platini no estaría ni siquiera en la banca, aquel domingo a mediodía en el estadio Cuauhtémoc de Puebla. Tarde que marcaría el adiós para veteranos como Bossis, Girese y Tigana.

Un gol tempranero de Ceulemans estusiasmaba a los belgas, sin embargo Ferreri y Papin daban la vuelta al marcador. Claesen empataba al 73’ y mandaba el juego a tiempos extras. Francia mostraría más tablas y superaría a Bélgica con tantos de Genghini y Amoros. Havelange entregaría medallas a vencedores y vencidos, en una pasarela sin importancia.

Un año después, Michel Platini anunciaba su retiro del balompié y la selección francesa entraría en un abismo. Se perdería los mundiales de Italia 90 y Estados Unidos 94, tras no lograr ambas clasificaciones.

Comenzaría a sonar Zinedine Zidane, francés de padres argelinos, y Francia pelearía la sede para la Copa del Mundo en 1998. Vendrían, entonces, tiempos mejores.