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Guerrero, la moneda en el aire

Martín Espinosa

Martín Espinosa

Hace poco tiempo, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, destacó la coordinación de esfuerzos y el trabajo que ha realizado el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, para lograr establecer acciones conjuntas en favor de los habitantes de la entidad; en este sentido, López Obrador expresó recientemente: “Muchas gracias al ciudadano gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, que ha sido muy respetuoso, ya que hemos trabajado de manera coordinada”.

Un buen ejemplo de esta coordinación entre los gobiernos estatal y federal es que, según datos oficiales, los índices delictivos en Guerrero disminuyeron en los últimos cinco años en casi 50 por ciento.

Sin embargo, tras los recientes resultados electorales en los estados de Coahuila e Hidalgo, quedó de manifiesto que el trabajo a nivel regional da buenos frutos en las elecciones locales. Guerrero es una de las entidades donde se vivirá una verdadera batalla electoral el próximo año.

La realidad es que el mandatario estatal ha venido realizando un gran esfuerzo, principalmente a través de programas que generan cercanía con la población. Fue a través del titular de la Secretaría de Desarrollo Social de Guerrero, Mario Moreno Arcos, quien fuera ya dos veces alcalde de Chilpancingo, como se gestionaron recursos ante la Secretaría de Energía federal (Sener) por el orden de los 263.9 millones de pesos del Fondo de Servicio Universal Eléctrico (FSUE), para ampliar la cobertura de redes eléctricas en la entidad, lo que permitió llevar este importante servicio a las localidades de 52 municipios del estado que no contaban con energía eléctrica hasta el día de hoy. Si tomamos en cuenta que Guerrero cuenta con 81 municipios, hablamos de más de la mitad de ellos.

Para tales fines se integraron 332 expedientes de obra, que beneficiaron a 27 mil 804 habitantes de 6 mil 988 viviendas en distintas regiones. Cabe destacar que se trata de acciones que han incidido a la baja de manera contundente en el tema de la inseguridad. Prueba de ello son los datos oficiales que confirman que Guerrero ha logrado disminuir las cifras de homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes, para ubicarse, por primera vez, debajo de los 10 estados que encabezan la lista.

También, dichos logros han venido a reforzar el programa Aprende en Casa, que durante la crisis de salud actual ha implementado la Secretaría de Educación Pública (SEP) con motivo del confinamiento en que se mantienen miles de familias guerrerenses a causa de la pandemia.

Con ello, actualmente se han incorporado a este beneficio cientos de hogares que carecían de luz eléctrica a causa de la lejanía de sus comunidades con respecto de los principales centros urbanos, tanto así que niños y jóvenes de muchas comunidades nunca habían visto un foco encendido en sus casas en pleno siglo XXI.

Guerrero se Ilumina es un noble programa que ha cambiado, en la práctica, la vida de los guerrerenses, convirtiéndose, en poco tiempo, en una de las acciones sociales emblemáticas de la actual administración estatal, lo que también ha contribuido a mejorar el nivel de vida de los pueblos y comunidades más alejados y ha permitido reducir de manera sustancial los indicadores de pobreza en esta entidad suriana.

Desde mi punto de vista, a lo largo de este tiempo, el secretario de Desarrollo Social del estado, Mario Moreno Arcos, ha venido desempeñando una labor de “a pie” en las comunidades más alejadas y más olvidadas, tanto por gobiernos anteriores a la administración de Astudillo Flores como del gobierno federal, por lo que, sin duda, Moreno Arcos podría contender a la gubernatura guerrerense junto con un abanico de candidatos que puede proponer el Revolucionario Institucional. Será muy importante la decisión que tome, tanto el PRI nacional como el estatal, para escoger al mejor candidato y estar dentro de la contienda para el 2021.

También, en el caso de Morena, la definición de candidatos es muy importante, ya que sus “superdelegados” se han visto expuestos al escrutinio mediático, manchados en algunas ocasiones, tanto por los bienes que poseen y que no corresponden con sus ingresos como por los negocios que han realizado al amparo de la gestión del presidente López Obrador.

Para el caso de Guerrero, la moneda está en el aire frente a los resultados y al trabajo de la presente administración estatal.

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